Correos de Cuba: "que no transcurra un sólo día sin escuchar Radio Martí"

Correos dirigidos a Orlando González Esteva por oyentes del programa “Entre Nosotros”, que se transmite por Radio Martí de 11 a.m. a 12 y de 10 p.m. a 11 p.m., de lunes a viernes.

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Saludos, Orlando. Qué triste que nuestra Cuba se derrumbe a pedazos, ante nuestros ojos, como el edificio de Sagua la Grande, y lo peor es que va a seguir sucediendo. Hay otros derrumbes, como los de la moral, la vergüenza, la autoestima. Y digo la autoestima porque el hecho de que tantos cubanos digan que no se puede hacer nada ante esto, descubre que vivimos en una nación enferma del alma, como decía esa canción que cantaba Pacho Alonso. Orlando, cómo sufro con estas cosas. Ojalá que algún día unamos voluntades para cambiar esto.

No sabes cuánto me levantan tus palabras. Por supuesto que no perderé el nexo con ustedes: aunque no lo creas, eres mi mejor amigo desde la pequeña distancia. Te felicito porque desempolvas temas a los que, a veces, no se les da la relevancia que merecen, ya sea por interés de algunos que censuran con total impunidad o por la ignorancia humana, que también hace estragos. Alguien dijo una vez que la ignorancia no tiene principio, pero si un fin… Soy de los que creo que nada de lo que rodea al ser humano le es ajeno. Saludos.

Matanzas

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“Saludos, Orlando. Tuve algunos problemas con el correo electrónico y por eso me fue imposible comunicarme con usted y los amigos de "Entre nosotros". Le cuento que su lectura de mi historia fue todo un acontecimiento en casa. Puedo decirle que, a mis 42 años, esta experiencia cuenta como una de las más emotivas e inspiradoras en mi vida. Ante tanta amargura por los sin sabores inacabables, impuestos por quienes nos mal gobiernan, ¡que no nos permiten desplegar las alas de la creatividad y el derecho a la libre expresión, sin censura y sin represión!, son acciones como las que usted y su equipo realizan, burbujas de oxígeno que nos ayudan a respirar en este contaminado, gris y apocalíptico terruño que tanto amamos.

Gracias de veras. Mis palabras escritas, en su voz, adquieren un matiz multicolor y un resplandor cargado de brillo esperanzador. Hay gestos que no tienen cómo pagarse. Desde ahora y para siempre me considero su eterno deudor.

Artemisa

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“Querido Orlando. Deseo decirte que antes de escucharlos, hará como 2 años, tenía una imagen distorsionada de José Martí. Para mí era un comunista más. Gracias por aclarar mis dudas. Te cuento que soy un Ministro del Evangelio de nuestro Señor Jesucristo y trabajo arduamente porque mi amada patria conozca la bendición que es conocer al Señor y obedecerlo.

Las cosas no andan bien y estamos cansados de tantos dimes y diretes y politiquerías. Te pido que, si conoces algún Ministerio Cristiano que esté solidarizado con nuestra causa, por favor, me pongas en contacto con ellos.

Songo la Maya

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“Saludos y muchas bendiciones para este programa y para todos los que lo hacen posible. En Palma Soriano crece la audiencia, debido a los muy diversos temas que en cada transmisión nos dedican. Esto, en parte, ha sido posible gracias a la entrega de los radios.

Los programas cada día están más al tanto de lo que nos hace falta escuchar y debatir. Se aprende muchísimo con éstos y sé que es propio de una radio tan pendiente de las necesidades informativas y cognoscitivas de este sometido pero por siempre pueblo suyo. Vivimos adheridos a la censura, deseosos y ansiosos de desprendernos del oficialismo y sus incesantes mentiras y falsedades. Cuando el cubano de a pie escucha estos programas, seguro estoy de que siente la imperante necesidad de que no transcurra un sólo día sin escuchar Radio Martí. Libertad, para que nunca seamos privados del conocimiento como principal virtud y para poner fin a esta servidumbre”.

Palma Soriano