En el ataque murieron cinco integrantes del Ejército, un policía y tres civiles, mientras que al menos 20 personas resultaron heridas y varias edificaciones quedaron reducidas a escombros.
Al menos 8 personas murieron y otras 20 resultaron heridas el sábado en un atentado con explosivos en el sur de Colombia que fue atribuido por las autoridades a la guerrilla de las FARC, en el peor ataque a un pueblo por parte del grupo rebelde desde el inicio de las conversaciones con el Gobierno en busca de un acuerdo de paz.
Según fuentes militares, los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lanzaron misiles de fabricación casera contra una casa que servía de cuartel al Ejército y a la Policía en el municipio de Inzá, en el departamento del Cauca, una zona con fuerte presencia de rebeldes.
En el ataque murieron cinco integrantes del Ejército, un policía y tres civiles, mientras que al menos 20 personas resultaron heridas y varias edificaciones quedaron reducidas a escombros.
"Condenamos y repudiamos el cobarde ataque en Inzá", escribió el presidente Juan Manuel Santos en su cuenta de Twitter, tras señalar que viajará a la zona para realizar un consejo de seguridad.
Por su parte, el ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón rechazó el ataque, al señalar que "esto demuestra la actitud criminal y de barbarie de las FARC".
El grupo rebelde inició en noviembre del año pasado en La Habana unas conversaciones con el Gobierno de Santos en busca de alcanzar un acuerdo que termine con un conflicto armado de casi medio siglo que ha dejado al menos 200.000 víctimas, la mayoría civiles.
Santos ha rechazado cualquier tregua bilateral mientras transcurren los diálogos.
Según fuentes militares, los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lanzaron misiles de fabricación casera contra una casa que servía de cuartel al Ejército y a la Policía en el municipio de Inzá, en el departamento del Cauca, una zona con fuerte presencia de rebeldes.
En el ataque murieron cinco integrantes del Ejército, un policía y tres civiles, mientras que al menos 20 personas resultaron heridas y varias edificaciones quedaron reducidas a escombros.
"Condenamos y repudiamos el cobarde ataque en Inzá", escribió el presidente Juan Manuel Santos en su cuenta de Twitter, tras señalar que viajará a la zona para realizar un consejo de seguridad.
Por su parte, el ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón rechazó el ataque, al señalar que "esto demuestra la actitud criminal y de barbarie de las FARC".
El grupo rebelde inició en noviembre del año pasado en La Habana unas conversaciones con el Gobierno de Santos en busca de alcanzar un acuerdo que termine con un conflicto armado de casi medio siglo que ha dejado al menos 200.000 víctimas, la mayoría civiles.
Santos ha rechazado cualquier tregua bilateral mientras transcurren los diálogos.