Una propuesta de ley para permitir que Estados Unidos niegue visas y pueda congelar los activos financieros de los violadores de los Derechos Humanos está recibiendo una atención renovada en el Congreso ahora que el senador Ben Cardin, el principal arquitecto de la medida, se ha convertido en el demócrata más prominente en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
El proyecto de ley le daría al Presidente amplia autoridad para imponer sanciones a las personas involucradas en asesinatos, torturas y otras violaciones de los Derechos Humanos, publica este domingo The Baltimore Sun.
Es el tipo de legislación que Cardin –un exdirigente de la Comisión de Helsinki orientada a los Derechos Humanos y un campeón de las causas humanitarias globales– perseguirá imponer en su nuevo papel. "Hacer frente a violaciones de los Derechos Humanos internacionalmente será una aspiración muy alta en mi agenda", dijo Cardin en una entrevista con The Baltimore Sun.
Cardin, de 71 años, fue elevado a miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado este mes de abril, después que su predecesor, el senador Bob Menendez, de Nueva Jersey, fuera acusado de cargos federales por presunta corrupción.
En términos generales, Cardin ha sido favorable a la Casa Blanca y discutió con su predecesor Menendez en temas como la política hacia el régimen comunista de Cuba, aunque la legislación que promueve afectaría a la isla, que tiene el triste récord de estar entre los mayores violadores de los Derechos Humanos en este hemisferio.