Casa Blanca renueva ley que sustenta el embargo al régimen cubano

El presidente Joe Biden. (Reuters/Leah Mills).

El presidente estadounidense, Joe Biden, renovó el viernes por otro año la Ley de Comercio con el Enemigo, que sustenta el embargo económico a Cuba.

La orden presidencial No. 2022-22 recuerda que la determinación previa, firmada el 7 de septiembre de 2021, acerca del ejercicio de ciertas autoridades bajo la Ley de Comercio con el Enemigo, está a punto de expirar el próximo 14 de septiembre de 2022.

"Por la presente determino que la continuación del ejercicio de esas autoridades con respecto a Cuba durante 1 año es de interés nacional de los Estados Unidos", escribió Biden al ordenar que se mantenga vigente hasta el 14 de septiembre de 2023.

El mandatario demócrata también ordenó al Secretario de Hacienda que publicara esa determinación en el Registro Federal de los Estados Unidos.

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Tras conocer la decisión del presidente estadounidense el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel, manifestó el sábado su descontento.

"Biden no se atrevió a quitarnos el "pretexto" y firmó por la continuidad del bloqueo", escribió el gobernante cubano en Twitter.

"El crimen ha durado demasiado, pero la Revolución Cubana lo sobrevivirá", aseguró.

Su canciller, Bruno Rodríguez, dijo que "Biden se convierte en el 12° presidente de EEUU en ratificar el marco que sostiene la política de abuso contra Cuba y su pueblo".

Sin embargo, Washington ha reiterado en numerosas ocasiones que esta sanción no tiene como objetivo al pueblo cubano, sino que restringe los ingresos del gobierno cubano y los fondos que el régimen cubano utiliza para entrenar y equipar su aparato militar represivo y de seguridad interna.

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En 1962 el Congreso de EEUU prohibió expresamente en su Ley de Ayuda al Exterior la asistencia a Cuba y autorizó al Presidente, John F. Kennedy, a establecer un "embargo total a todo el comercio con Cuba”.

En marzo de 1996, el embargo dejó de ser una serie de proclamas presidenciales y se convirtió en una ley de los Estados Unidos. Su existencia quedó condicionada a que el régimen adopte pasos hacia la democratización y muestre respeto hacia los derechos humanos.

La propaganda del régimen comunista culpa al embargo económico, al que se refieren como “bloqueo”, de ser el mayor causante del desplome económico en la isla.