El rescate del país se vio en peligro el miércoles cuando el Parlamento rechazó confiscar una parte de todos los depósitos superiores a los 200.000 euros.
La Comisión Europea afirmó hoy que Chipre debe respetar los términos financieros acordados del rescate cuando presente su nuevo plan. La CE dejó claro ante las votaciones en el Parlamento chipriota que las soluciones alternativas que respeten los términos financieros serían las únicas que se respetarían.
Las exigencias apuntan a que los gravámenes eximan los depósitos por debajo de los 100.000 euros, pero las autoridades chipriotas renegaron la propuesta. El rescate del país se vio en peligro el miércoles cuando el Parlamento rechazó confiscar una parte de todos los depósitos superiores a los 200.000 euros y ha alimentado los temores de que la economía chipriota esté al borde de la bancarrota.
El vocero del gobernador Christos Stylianides dijo que el Banco Central analizaba una alternativa para recaudar fondos, pero reduciendo los 5.800 millones de euros que se requieren para el rescate. El presidente Nicos Anastasiades se reunirá además con los representantes de los potenciales acreedores del país, a saber: el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea, la popularmente conocida ‘troika’ debe aprobar un plan alterno ideado por las autoridades chipriotas para que se autorice la entrega de los fondos.
El plan inicial, ideado en Bruselas la semana pasada, propuso que otros países de la eurozona y el FMI den a Chipre 10.000 millones de euros en créditos de rescate, solo si el país recauda 5.800 millones de euros mediante la confiscación de parte de los depósitos bancarios. El vicegobernador del banco central, Spyros Stavrinakis, dijo que no ha sido tomada aún una decisión sobre cuándo abrirán los bancos, cerrados desde el fin de semana pasado, y afirmó que el nuevo plan no ha sido presentado a los socios de la eurozona ni al FMI.
Las exigencias apuntan a que los gravámenes eximan los depósitos por debajo de los 100.000 euros, pero las autoridades chipriotas renegaron la propuesta. El rescate del país se vio en peligro el miércoles cuando el Parlamento rechazó confiscar una parte de todos los depósitos superiores a los 200.000 euros y ha alimentado los temores de que la economía chipriota esté al borde de la bancarrota.
El vocero del gobernador Christos Stylianides dijo que el Banco Central analizaba una alternativa para recaudar fondos, pero reduciendo los 5.800 millones de euros que se requieren para el rescate. El presidente Nicos Anastasiades se reunirá además con los representantes de los potenciales acreedores del país, a saber: el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea, la popularmente conocida ‘troika’ debe aprobar un plan alterno ideado por las autoridades chipriotas para que se autorice la entrega de los fondos.
El plan inicial, ideado en Bruselas la semana pasada, propuso que otros países de la eurozona y el FMI den a Chipre 10.000 millones de euros en créditos de rescate, solo si el país recauda 5.800 millones de euros mediante la confiscación de parte de los depósitos bancarios. El vicegobernador del banco central, Spyros Stavrinakis, dijo que no ha sido tomada aún una decisión sobre cuándo abrirán los bancos, cerrados desde el fin de semana pasado, y afirmó que el nuevo plan no ha sido presentado a los socios de la eurozona ni al FMI.