El periodista y el camarógrafo tenían la autorización de filmar en ese lugar, indicó Sky News, pero hicieron referencia a la masacre del 1989.
Un periodista y un camarógrafo de la cadena británica Sky News, que filmaban un reportaje en la plaza Tiananmen en Pekín, fueron detenidos el viernes por la policía china, en un operativo que resultó transmitido en directo a la televisión.
Los telespectadores de la cadena pudieron ver al reportero Mark Stone en el furgón de la policía, donde continuó haciéndose filmar y comentando lo sucedido, sin que sus interlocutores se dieran cuenta que esteba en directo.
"Estábamos aquí en la plaza Tiananmen filmando reportajes y nos impidieron continuar a causa de una frase. Estábamos tratando de hablar de las manifestaciones de 1989 y no les gustó", dijo Stone a los telespectadores. Mientras el periodista hablaba frente a la cámara, un policía chino filmaba la escena.
La plaza Tiananmen fue escenario en 1989 de manifestaciones a favor de la democracia, reprimidas de manera sangrienta por las autoridades chinas.
El periodista y el camarógrafo tenían la autorización de filmar en ese lugar, indicó Sky News. Según Sky News, tras su paso por la comisaría, el periodista regresó a las oficinas de la cadena en Pekín.
Los telespectadores de la cadena pudieron ver al reportero Mark Stone en el furgón de la policía, donde continuó haciéndose filmar y comentando lo sucedido, sin que sus interlocutores se dieran cuenta que esteba en directo.
"Estábamos aquí en la plaza Tiananmen filmando reportajes y nos impidieron continuar a causa de una frase. Estábamos tratando de hablar de las manifestaciones de 1989 y no les gustó", dijo Stone a los telespectadores. Mientras el periodista hablaba frente a la cámara, un policía chino filmaba la escena.
La plaza Tiananmen fue escenario en 1989 de manifestaciones a favor de la democracia, reprimidas de manera sangrienta por las autoridades chinas.
El periodista y el camarógrafo tenían la autorización de filmar en ese lugar, indicó Sky News. Según Sky News, tras su paso por la comisaría, el periodista regresó a las oficinas de la cadena en Pekín.