Los extraterrestres, Raúl Castro y el VI Congreso

El informe central que presentó el mandatario Raúl Castro a sus correligionarios en el VI Congreso del Partido Comunista cubano demuestra a todas luces que el hermano menor de la dinastía que gobierna a la isla estuvo secuestrado todos estos años por los extraterrestres y acaba de ser liberado.

No es broma. Es una certeza que indican algunos de los planteamientos de este nuevo Raúl Castro, ya que el otro, el impostor, volvió a su planeta luego de estar casi 50 años en la tierra en el experimento del socialismo de la isla.

Pero veamos. El nuevo Raúl Castro, recargado como Matrix dice de forma tal, sin dudas y casi con la correa en la mano para darles en las nalgas a los tontos periodistas cubanos este punto:

…la prensa cubana, en sus diferentes formatos, está llamada a jugar un papel decisivo con el esclarecimiento y difusión objetiva, constante y crítica de la marcha de la actualización del Modelo Económico, de modo que con artículos y trabajos sagaces y concretos, en un lenguaje accesible para todos, se vaya fomentando en el país una cultura sobre estos temas.

En este frente se requiere también dejar atrás, definitivamente, el hábito del triunfalismo, la estridencia y el formalismo al abordar la actualidad nacional y generar materiales escritos y programas de televisión y radio, que por su contenido y estilo capturen la atención y estimulen el debate en la opinión pública, lo que supone elevar la profesionalidad y los conocimientos de nuestros periodistas; si bien es cierto que, a pesar de los acuerdos adoptados por el Partido sobre la política informativa, en la mayoría de las veces ellos no cuentan con el acceso oportuno a la información ni el contacto frecuente con los cuadros y especialistas responsabilizados de las temáticas en cuestión.

La suma de estos factores explica la difusión, en no pocas ocasiones, de materiales aburridos, improvisados y superficiales.

No menos importante será el aporte que nuestros medios de difusión masiva deben propiciar a favor de la cultura nacional y de la recuperación de valores cívicos en la sociedad..

Los periodistas cubanos son víctimas del dogal de censura que los engarrota sin darles oportunidades a decir lo que ocurre en realidad en cada una de sus fuentes. En primer lugar, porque el propio Partido Comunista es quien dirige a la prensa cubana, que no es independiente y cuando los periodistas en diferentes etapas se propasaron en sus funciones fueron liquidados de sus puestos.

Hay una larga lista de periodistas expulsados solo por tratar de colaborar con el propio régimen en la noble idea de que divulgar una determina información ayudaría a la conciencia nacional, algo que no creyeron los jerarcas ideológicos y !PUM! para la calle ese periodista, acusado muchas veces de ser un contrarrevolucionario.

Cualquier funcionario del Partido, con un meñique, tiene más poder que un periodista cubano que no recibe, ni el apoyo de su periódico, ni mucho menos de la organización periodística a la que pertenece cuando se enfrenta con sus convicciones periodísticas ante el dogma político.

Hay que ser cínico, o secuestrado por los extraterrestres, para decir que es necesario dejar atrás el hábito del triunfalismo, la estridencia y el formalismo al abordar la actualidad nacional. ¡Madre mía! ¿Y quien les entrega a los periodistas los informes triunfalistas, estridentes sobre la situación nacional y además les recomienda que no sean muy amplios en determinadas cuestiones para que el enemigo no se entere? ¿No es el Partido?

¿No revisan esos materiales los propios directores que el Partido seleccionó para cada uno de los medios de prensa? Pero incluso los mismos directores no quieren equivocarse y antes que lo sancionen o lo saquen de sus puestos, pues prefieren soslayar una información que consideren les puede traer problemas.

Pero si este punto puede ser discutible de que el actual mandatario cubano es el mismo o no, el siguiente tema remata el criterio de que este Raúl Castro llegó ayer del espacio.

Corresponde al Estado defender la soberanía e independencia nacional, valores que enorgullecen a los cubanos y continuar garantizando el orden público y la seguridad ciudadana que distinguen a Cuba por ser uno de los países más seguros y tranquilos del mundo, sin narcotráfico ni crimen organizado, sin niños o adultos mendigos, sin trabajo infantil, sin cargas de caballería contra los trabajadores, estudiantes u otros sectores de la población, sin ejecuciones extrajudiciales, cárceles clandestinas ni torturas, a pesar de las campañas que sin prueba alguna constantemente se orquestan contra nosotros, ignorando con marcada intención que todas esas realidades son, en primer lugar, derechos humanos fundamentales, a los que ni siquiera se puede aspirar por la mayoría de los habitantes del planeta.

¿Derechos humanos fundamentales? Su relación, que puede ser cuestionada en lo tocante a la veracidad, no es en realidad derechos fundamentales. Solo como un ejercicio para que se informe este Raúl Castro, y algunos que creen que no se violan los derechos humanos en Cuba, les exponemos a continuación varios artículos de la Declaración Universal de los derechos humanos, con algunos comentarios míos entre paréntesis


Artículo 9.
Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado.
(Este punto no vale la pena siquiera comentarlo)
Artículo 10.
Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra ella en materia penal.
(La rama de la justicia en Cuba no es independiente y todos los jueces dependen del estado, por lo tanto no es imparcial su juicio)
Artículo 11.
1. Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa.
2. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueron delictivos según el Derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito.
(Solo es válido recordar, entre tantos ejemplos, aquellos condenados que estaban detenidos por el tráfico de divisas que cuando se despenalizó el dólar, muchos continuaron encarcelados)
Artículo 12.
Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra tales injerencias o ataques.
(¿Los mítines de repudio que significan?)
Y si estos artículos que son en realidad fundamentales no le bastan les dejo estos otros que son violados de manera permanente en la isla.
Artículo 13.
1. Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado.
2. Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país.
(Los cubanos cuando salen del país y se tardan 11 meses y un día en regresar pierden sus derechos ciudadanos. ¿Lo sabrá Raúl Castro?)
Artículo 19.
Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.
(¿Sabrá esto Raúl Castro?)
Artículo 20.
1. Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas.
2. Nadie podrá ser obligado a pertenecer a una asociación.

El informe central del primer secretario del Partido comunista en funciones, fue más de lo mismo con la única noticia importante es que ahora sacaron cuentas y se dieron 10 años de vida política para el disfrute de todo el grupo de ancianos dirigentes.

Fuera de eso el mismo cantico de la defensa contra el imperio y la guerra de todo el pueblo, los errores cometidos en medio siglo que juran por su madre no hacer más y las consabidas culpas a los contrarrevolucionarios confabulados con una potencia extranjera que son necesario encarcelar cada cierto tiempo y luego liberarlos para demostrar lo magnánimos que son. En fin, el mismo lenguaje delirante y excluyente de hace 50 años.

Todo eso demuestra que este Raúl Castro, que regañó a los subditos del Partido con rudeza y criticó el trabajo realizado en estos más de 50 años, acaba de llegar del espacio y llega con la vieja memoria de los inicios de hace medio siglo , sin saber en apariencias la realidad y mas perdido que Matías Pérez. Por lo tanto, poco hay que esperar de los resultados del VI Congreso y del nuevo hit parade del castrismo, el reggaetón del Modelo Económico.