A pesar del endurecimiento de la aplicación de las sanciones de los Estados Unidos contra el régimen de Fidel Castro, por parte del gobierno del presidente George W. Bush, desde hace más de dos años, funcionarios cubanos están comprando productos agrícolas en Estados Unidos, que en el año 2003 se convirtió en el principal abastecedor de alimentos a la isla.
El gobierno de Castro compró el año pasado productos agrícolas estadounidenses, como granos, soja y maíz, por valor de 300 millones de dólares, y este año la compañía castrista Alimport espera alcanzar los 400 millones de dólares en compras.
Por su parte, Cuba anunció que no cancelará ninguno de sus contratos de importaciones de ganado y carnes de vacuno y pollo a productores de Estados Unidos a causa de la gripe aviar y del mal de las "vacas locas" y el importador estatal Alimport anunció nuevas compras de Cuba.