La Cumbre de las Américas concluyó el viernes con el acuerdo de un pacto regional sobre migración que beneficia a inmigrantes de la región, entre ellos, los cubanos.
El convenio firmado por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y otros líderes del hemisferio occidental, titulado la "Declaración de Los Ángeles", incluye el compromiso de Costa Rica a extender protecciones para cubanos, nicaragüenses y venezolanos que llegaron a su territorio antes de marzo de 2020.
También Estados Unidos se comprometió a otorgar 314 millones de dólares para ayudar a los países que acogen a refugiados y migrantes y está reanudando o ampliando los esfuerzos para reunir a las familias haitianas y cubanas.
Estados Unidos se ha comprometido a reasentar a unos 20.000 refugiados durante el año fiscal 2023-2024.
Canadá ampliará ofertas para trabajadores agrícolas y “espera dar la bienvenida a más de 50,000 trabajadores agrícolas de México, Guatemala y el Caribe en 2022.
Belice además se comprometió a regularizar a los migrantes centroamericanos y caribeños.
Por otra parte, la Declaración de Los Ángeles afirma que en el futuro se debe buscar una gestión humanitaria en las fronteras que entre otros aspectos, propicie el “retorno de migrantes que carecen de necesidades de protección u otra base legal para permanecer” en otro país.
Además se propone facilitar los retornos de los migrantes a sus países de residencia u origen más reciente.
También han acordado apoyar los retornos voluntarios asistidos, además de “fortalecer el intercambio de información y cooperación bilateral y regional de aplicación de la ley para combatir el tráfico de migrantes y la trata de personas”.
Con este acuerdo, México se compromete a agregar visas de trabajadores temporales hasta para 20.000 guatemaltecos al año.
También se incluyen vías legales para entrar a los países, ayudas a las comunidades más afectadas por la migración, una gestión humana de las fronteras y respuestas de emergencia coordinadas.
Estados Unidos anunció una operación encubierta y multilateral para interrumpir las redes de contrabando de personas en todo el Hemisferio Occidental.
Las autoridades han dicho que se trata de un operativo sin precedentes en América Latina, que incluye el desplazamiento de 1.300 agentes en la región y un presupuesto de más de 50 millones de dólares.
"Esto es solo un comienzo", dijo el presidente Joe Biden al mencionar la Declaración de Los Angeles.
"Queda mucho más trabajo", afirmó.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, dijo el jueves que la declaración de la Cumbre reconoce la magnitud de la migración regional.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, a través de su canciller Bruno Rodríguez, dijo que con la Declaración Hemisférica sobre Migración y Protección de Migrantes Washington "muestra su visión racista, xenófoba y expoliadora de los migrantes y no atiende en modo alguno las causas reales de la migración".
El canciller cubano dijo que sería imposible obtener resultados concretos en la gestión de los flujos migratorios irregulares "si no se materializan el diálogo y la colaboración genuina entre todos los gobiernos implicados, para dar respuesta a un problema de naturaleza global".
Los gobernantes y cancilleres de Cuba, Venezuela y Nicaragua no fueron invitados a la IX Cumbre de Las Américas porque Estados Unidos consideró que estos tres países no cumplen los compromisos democráticos del hemisferio occidental.