"Yasmany Tomás jugó para los Yankees de Cuba, el equipo Industriales", comentaba el narrador de una televisora norteamericana. Y con el eco de esas palabras todavía en el éter, el novato de los Diamondbacks de Arizona disparó este lunes un jonrón de tres carreras.
Fue un batazo a lo profundo de los jardines central y derecho, así el mulato de La Habana debió aplicar la potencia de sus brazos hacia la banda contraria, aunque sus 6'2" de estatura y 255 libras de peso facilitaban ese trabajo en el partido contra Dodgers de Los Ángeles, en la Liga del Cactus.
Tomás, a quien Víctor Mesa, el polémico mánager de la selección nacional de Cuba calificó hace dos años como el mejor bateador de su país, logró este año un contrato de agente libre por seis años y $68.5 millones, la cifra promedio anual más jugosa para un jugador llegado de la Isla. En su patria, el ahora novato del Big Show jugó esencialmente los jardines, pero el alto mando del Arizona quiere formarlo como antesalista.
Hasta el fin de semana, Tomás –exponente, con sus ojos rasgados de toda la mezcla de razas que caracteriza a Cuba– había participado en 14 desafíos del Spring Training, con average ofensivo de .214 (42-9); tenía en su expediente dos dobles, un triple y un jonrón.
Una sola base por bolas y 10 ponches en su faena no son cifras como para preocuparse: El muchacho de 24 años fue convocado para pegarle duro a la pelota y es común que los sluggers abaniquen también el aire. Y aunque el aporte del rookie fue insuficiente la víspera –Dodgers se llevó el triunfo, 7x4– Tomás mejoró sus números hasta .267, con una tarde perfecta de tres indiscutibles en tres turnos oficiales.
¿Estará el habanero en el róster oficial de Arizona cuando inicie la temporada? Esa pregunta bullía en la dirección del equipo cuando decidieron probarlo en el terreno.
"Uno nunca sabe lo que tiene en las manos", ha declarado Tony la Russa, de la dirección del Arizona y mánager de San Luis Cardinals en 2001. "Hace 14 años decidimos colocar a un muchacho en el róster de San Luis ante Javier Vázquez; una slider venenosa retiró al debutante por la vía de los strikes, pero en su siguiente viaje al cajón, mismo lanzamiento… y batazo contra las cercas. En poco tiempo, y a lo largo de varias décadas, todos conocerían a Albert Pujols".
Establecer ahora una comparación entre el cubano y el dominicano sería demasiado ambicioso, pero estoy seguro de que Tomás hará lo suyo en las Mayores. Tiempo al tiempo, confío en que el nuestro aportará los triunfos necesarios para que los D-Backs borren su horrible marca de hace un año, los peores de la Gran Carpa con 98 derrotas.