La Convención Nacional Republicana se inauguró a la hora prevista este lunes, bajo el lema de ¨lo podemos hacer mejor", centrado en la crisis económica y en la capacidad de su candidato presidencial Mitt Romney de resolverla mejor de lo que ha podido hacer el presidente Obama.
Los republicanos tratan de hacer llegar al país una imagen de Romney positiva, no solo por lo que respecta a su capacidad de resolver sus problemas económicos, sino también como persona. Las encuestas indican que los norteamericanos confían más en el talento económico de Romney que de Obama, pero se sientan más atraídos por la personalidad del presidente.
En estos últimos días, Romney ha desplegado la ayuda de su familia, con entrevistas televisadas de su esposa Ann Romney y de sus cinco hijos, además de mostrar las imágenes de su gran familia inmediata, pues tiene 18 nietos, lo que presenta un carácter más humano y menos distante del que hasta ahora ha transmitido.
Los organizadores han previsto llevar a todas, un total de 29 familiares inmediatos, a la convención donde todo el país podrá verlos en sus pantallas de televisión.
De momento, la convenció se suspendió inmediatamente después de iniciar sus sesiones, a causa del huracán Isaac.
Al inaugurar la convención, se puso en marcha un reloj especial para marcar el rápido aumento de la deuda pública norteamericana, que muchos expertos ven como un obstáculo para la recuperación económica y que los republicanos consideran una responsabilidad del presidente Obama, a quien acusan de permitir e incluso fomentar un gasto excesivo.
En los ocho minutos necesarios para inaugurar y suspender la convención, este reloj pasó de cero a casi 3 mil millones de dólares de deuda adicional acumulada en tan poco tiempo.
El huracán Isaac constituye una preocupación adicional, no por la amenaza material a la convención, pues se está alejando de las costas de la Florida, sino por el riesgo de que distraiga la atención del público en un momento crucial para la campaña de Romney.
Casualmente, el huracán Isaac se dirige hacia Nueva Orleans siguiendo el mismo curso y en la misma fecha que el catastrófico Katrina hace siete años.
Las estadísticas muestran que habitualmente el candidato que va delante en estos momentos de la campaña, gana las elecciones, pero las encuestas muestran que Romney y el presidente Obama están muy igualados en intención de voto y cualquier distracción puede resultar perjudicial para Romney.