Allana policía rusa oficina de Amnistía Internacional

Amnistía Internacional

Funcionarios de la fiscalía general rusa y la policía impositiva realizaron una auditoría inesperada en sus oficinas.
Los fiscales y la policía impositiva allanaron el lunes las oficinas centrales en Moscú de Amnistía Internacional y otros grupos defensores de los derechos humanos, en la continuación de una serie de presiones que según los activistas son intentos del presidente Vladimir Putin por sofocar toda disidencia.

Sergei Nikitin, el director de Amnistía en Rusia, dijo a The Associated Press que funcionarios de la fiscalía general y la policía impositiva realizaron una auditoría inesperada en sus oficinas. Nikitin agregó que los funcionarios exigieron documentos de la organización que el gobierno ya tiene en archivo.

Fueron acompañados por periodistas de la televisión estatal NTV, que ha sido usada por el Kremlin para atacar a sus adversarios políticos.

Otras organizaciones de derechos humanos también fueron inspeccionadas.

El movimiento Por los Derechos Humanos, del veterano activista Lev Ponomarev, también fue inspeccionado el lunes por funcionarios y un equipo de NTV. En una carta al fiscal de Moscú, calificó el allanamiento de ilegal porque los fiscales no presentaron pruebas de que su organización hubiese violado la ley.

Veredicto Público, un grupo legal por los derechos humanos, también fue inspeccionado el lunes.

Putin se ha mostrado suspicaz sobre la actividad de las organizaciones no gubernamentales (ONG), especialmente las que reciben financiación estadounidense, a las que ha acusado de ser fachadas para la intrusión de Estados Unidos en la política rusa.

Después de retornar a la presidencia en mayo, el parlamento convalidó una ley respaldada por el Kremlin que requiere que todas las ONG que reciben financiación extranjera se registren como "agentes extranjeros", un término que para muchos rusos es peyorativo.

Las autoridades rusas han inspeccionado hasta unas 2.000 organizaciones no gubernamentales en el último mes, según Pavel Chikov, miembro del consejo presidencial de derechos humanos.

Los allanamientos comenzaron después que Putin pronunció un discurso en el que instó al Servicio Federal de Seguridad a centrar su atención en los grupos que reciben financiación extranjera, que según dijo "imponen presiones a Rusia".

Aunque el ministerio de Justicia dijo recientemente que no era aplicable, afirmó el lunes a la agencia noticiosa Interfax que las inspecciones se llevaban a cabo respetando la ley sobre agentes extranjeros.

Pero según Chikov, muchas organizaciones han sido allanadas en cumplimiento de otra ley sobre "extremismo".

La embajada de Estados Unidos, Amnistía, el consejo presidencial de derechos humanos y Veredicto Público han manifestado preocupación por la ola de allanamientos.