El regreso del espía resultó toda una sorpresa para la opinión pública
El espía cubano René González, regresó en la tarde del viernes a territorio norteamericano tras pasar dos semanas en Cuba visitando a un hermano gravemente enfermo.
González regresó a cumplir otros tres años de su condena en libertad condicional, tras permanecer trece en la cárcel, luego de que la jueza federal de la corte de Miami, Joan Lenard, le otorgara un permiso de quince días para permanecer en Cuba.
La autorización de la jueza aconteció una semana después que el departamento de Justicia rechazara la petición del agente cubano por temor a que recibiera nuevas instrucciones de espionaje en La Habana.
La televisión estatal cubana agregó que durante su estancia en Cuba, González pudo estar con sus familiares, en particular con su hermano Roberto, quien padece de un cáncer extendido en varias zonas de su cuerpo.
González, de 55 años, fue detenido en Estados Unidos en 1998 junto a miembros de la Red Avispa como Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Fernando González, y fueron condenados en Miami por el delito de conspiración para espionar y cometer asesinato.
Mientras Estados Unidos le permitió viajar a Cuba a René González, los familiares del contratista Alan Gross se encuentran esperando un gesto recíproco de La Habana que todavía no se ha pronunciado al respecto.