La banda punk contestaria se encuentra de gira por ciudades europeas y su vocalista Gorki Aguila ha adelantado los planes de conquistar el espacio público a su regreso a la isla.
Porno Para Ricardo visita España por primera vez para hacer dos conciertos dentro de una minigira europea que en las últimas semanas los llevó a varios escenarios de Polonia. El primero de los conciertos en España se celebra este 26 de julio en la sala Harlem Jazz Club (calle Comtessa de Sobradiel, 8, Barcelona) donde presentarán algunos de los temas de su nuevo disco, Maleconazo. Aprovechamos su visita y quedamos con ellos a los pies de la emblemática Sagrada Familia de Barcelona. Gorki Águila nos hace un balance del tour y avanza algunos planes de futuro que se resumen en algo bien simple. Si el régimen no quería Porno Para Ricardo pues ahora va a tener dos tazas. No se rinden y se muestran dispuestos a seguir usurpando espacios en la Isla. Se acabó el tocar entre cuatro paredes.
Hoy en Barcelona, ya en el ecuador de vuestra gira, ¿cuál es el balance preliminar de la aventura?
La gira está de p...., y ya estamos a la mitad. Imagina las emociones que estamos teniendo porque es la primera vez que el grupo sale de Cuba en la alienación original. Es una manera estratégica de decir a los comunistas que bueno no nos dejó salir al grupo, pero ahora el grupo está aquí y está en Cuba también trabajando en el proyecto del estudio de la Paja Records. Y aquí afuera tocando a nombre del grupo también. O sea, si no me dejaste salir lo que hiciste fuer empeorar la situación porque bifurcó la idea. Ahora mismo nos sentimos muy contentos de estar explicando que ha sido una experiencia muy importante porque unifica la banda. Es la primera vez que se enfrenta a cómo se recibe lo que tú haces. Nosotros normalmente tocamos entre cuatro paredes y no es lo mismo que te digan cómo eres recibido, a vivirlo tú. Eso es muy importante y la gente nos ha sorprendido una vez más porque, aun no sabiendo tu idioma ni conociendo mucho las canciones, se han conectado de una manera muy participativa, y nos han recibido muy bien.
El de Barcelona este 26 de julio será un concierto significativo. El primero que hacéis en España y la primera vez que estáis en el país…
Es la primera vez en Barcelona, una ciudad que está muy linda y sobre todo la cantidad de mujeres lindas, que tú dices ‘pero, ¿para dónde miro, para dónde escojo? Genial, a mí me encanta eso.
Sois como un monolito a pesar de los intentos de desunión que ha intentado el régimen. ¿Cuál es la clave con un contexto tan adverso?
No sé la fórmula. Debe ser por la pasión y el optimismo que tenemos, aunque cuesta mucho haciendo nuestra música. A lo mejor esa hostilidad ha sido como un acicate, algo que te ayuda a tener más energía lejos de quitártela. Parece que la estrategia se topó con gente con la que no fue efectiva, la estrategia de desunirnos y de que claudiquemos no funcionará, por lo menos por mi parte. Sí ha habido cosas malas dentro del grupo, gente que ha dejado la banda, pero aun ahí seguimos, que es lo importante.
Esta semana salió a la luz una noticia sobre un grupo de metal cubano que acaba de pedir asilo en Miami. ¿Vosotros no haréis lo mismo?
Es muy cómica y súper simpática la noticia, por decirlo de alguna manera. A mí me parece que eso es infame porque te puedo decir que esa banda es una de las que más ha tocado en Cuba, que está unida a la oficialidad de una manera especial, en el sentido de que es una banda insigne del Maxim Rock, una institución creada para manipular el rock cubano, para darle supuestas ventajas a grupos que quieren integrarse. Pero tú ya sabes que cuando haces pacto con el diablo, el diablo te va a cobrar y te va a filtrar políticamente qué es lo correcto. Y te va a convertir en jun artista mediocre, porque no vas a ser sincero en lo que haces ya que no vas tener la total libertad para hacerlo. Hay gente que ni se da cuenta de eso. Este grupo ha sido muy simpático porque ha pedido asilo político y para colmo ha puesto como acápite de que están censurados en Cuba. O sea lo más lejos de eso exactamente son ellos. Me parece muy cómico, más allá de indignarme, para caerte en el piso y c.... de la risa.
Barcelona, Madrid y luego de nuevo a La Habana… ¿con qué proyectos? ¿Seguir tocando en el balcón?
No sé, yo quiero más allá del balcón, hacerlo en la calle, donde quiera. El espacio en Cuba tú tienes que usurparlo, como lo hicieron las Damas de Blanco, tienes que salir a la calle. Ya no es tiempo de recogerte, es tiempo de seguir tomando espacios y lugares, ámbitos físicos o no. Eso es lo que queremos.
En el concierto del Harlem Jazz Club presentaréis temas del nuevo disco, Maleconazo…
Algunos temas, no todos van a estar ahí. Al regresar a Cuba vamos a trabajar en otro disco. Seguiremos trabajando y divirtiéndonos.
¿Qué radiografía haces tú de la Cuba actual y de los cambios y reformas de Raúl Castro?
A mí me parece que todo es maquillaje lo que hace este tipo para seguir gobernando. Esa es la estrategia. No le vamos a permitir a alguien que ha destruido ese país que tenga más oportunidades. El futuro de Cuba debe estar ligado a la ausencia de la familia Castro en el poder. Quiero cambios con la gente que pueda proponer cosas nuevas, quizás nos equivocamos, pero tenemos que poder equivocarnos por nosotros mismos, no por ese tirano que ha demostrado que es inefectivo y ha destruido a un país y a generaciones enteras.
Esta entrevista fue publicada originalmente en el blog de Joan Antoni Guerrero
Hoy en Barcelona, ya en el ecuador de vuestra gira, ¿cuál es el balance preliminar de la aventura?
La gira está de p...., y ya estamos a la mitad. Imagina las emociones que estamos teniendo porque es la primera vez que el grupo sale de Cuba en la alienación original. Es una manera estratégica de decir a los comunistas que bueno no nos dejó salir al grupo, pero ahora el grupo está aquí y está en Cuba también trabajando en el proyecto del estudio de la Paja Records. Y aquí afuera tocando a nombre del grupo también. O sea, si no me dejaste salir lo que hiciste fuer empeorar la situación porque bifurcó la idea. Ahora mismo nos sentimos muy contentos de estar explicando que ha sido una experiencia muy importante porque unifica la banda. Es la primera vez que se enfrenta a cómo se recibe lo que tú haces. Nosotros normalmente tocamos entre cuatro paredes y no es lo mismo que te digan cómo eres recibido, a vivirlo tú. Eso es muy importante y la gente nos ha sorprendido una vez más porque, aun no sabiendo tu idioma ni conociendo mucho las canciones, se han conectado de una manera muy participativa, y nos han recibido muy bien.
El de Barcelona este 26 de julio será un concierto significativo. El primero que hacéis en España y la primera vez que estáis en el país…
Es la primera vez en Barcelona, una ciudad que está muy linda y sobre todo la cantidad de mujeres lindas, que tú dices ‘pero, ¿para dónde miro, para dónde escojo? Genial, a mí me encanta eso.
Sois como un monolito a pesar de los intentos de desunión que ha intentado el régimen. ¿Cuál es la clave con un contexto tan adverso?
No sé la fórmula. Debe ser por la pasión y el optimismo que tenemos, aunque cuesta mucho haciendo nuestra música. A lo mejor esa hostilidad ha sido como un acicate, algo que te ayuda a tener más energía lejos de quitártela. Parece que la estrategia se topó con gente con la que no fue efectiva, la estrategia de desunirnos y de que claudiquemos no funcionará, por lo menos por mi parte. Sí ha habido cosas malas dentro del grupo, gente que ha dejado la banda, pero aun ahí seguimos, que es lo importante.
Esta semana salió a la luz una noticia sobre un grupo de metal cubano que acaba de pedir asilo en Miami. ¿Vosotros no haréis lo mismo?
Es muy cómica y súper simpática la noticia, por decirlo de alguna manera. A mí me parece que eso es infame porque te puedo decir que esa banda es una de las que más ha tocado en Cuba, que está unida a la oficialidad de una manera especial, en el sentido de que es una banda insigne del Maxim Rock, una institución creada para manipular el rock cubano, para darle supuestas ventajas a grupos que quieren integrarse. Pero tú ya sabes que cuando haces pacto con el diablo, el diablo te va a cobrar y te va a filtrar políticamente qué es lo correcto. Y te va a convertir en jun artista mediocre, porque no vas a ser sincero en lo que haces ya que no vas tener la total libertad para hacerlo. Hay gente que ni se da cuenta de eso. Este grupo ha sido muy simpático porque ha pedido asilo político y para colmo ha puesto como acápite de que están censurados en Cuba. O sea lo más lejos de eso exactamente son ellos. Me parece muy cómico, más allá de indignarme, para caerte en el piso y c.... de la risa.
Barcelona, Madrid y luego de nuevo a La Habana… ¿con qué proyectos? ¿Seguir tocando en el balcón?
No sé, yo quiero más allá del balcón, hacerlo en la calle, donde quiera. El espacio en Cuba tú tienes que usurparlo, como lo hicieron las Damas de Blanco, tienes que salir a la calle. Ya no es tiempo de recogerte, es tiempo de seguir tomando espacios y lugares, ámbitos físicos o no. Eso es lo que queremos.
En el concierto del Harlem Jazz Club presentaréis temas del nuevo disco, Maleconazo…
Algunos temas, no todos van a estar ahí. Al regresar a Cuba vamos a trabajar en otro disco. Seguiremos trabajando y divirtiéndonos.
¿Qué radiografía haces tú de la Cuba actual y de los cambios y reformas de Raúl Castro?
A mí me parece que todo es maquillaje lo que hace este tipo para seguir gobernando. Esa es la estrategia. No le vamos a permitir a alguien que ha destruido ese país que tenga más oportunidades. El futuro de Cuba debe estar ligado a la ausencia de la familia Castro en el poder. Quiero cambios con la gente que pueda proponer cosas nuevas, quizás nos equivocamos, pero tenemos que poder equivocarnos por nosotros mismos, no por ese tirano que ha demostrado que es inefectivo y ha destruido a un país y a generaciones enteras.
Esta entrevista fue publicada originalmente en el blog de Joan Antoni Guerrero