Policía ataca protesta contra Daniel Ortega en Nicaragua

Protestas en Nicaragua en contra del gobierno de Daniel Ortega.

La Policía de Nicaragua realizó este sábado un nuevo ataque contra manifestantes autoconvocados que participaban en una protesta pacífica contra el presidente Daniel Ortega en Managua y arrestó a una cantidad no determinada.

La Policía nicaragüense, que se mantenía al acecho de la protesta desde antes de su inicio, en la zona central de Managua, atacó de forma repentina a los manifestantes con bombas de sonido, balas de goma y agresiones físicas.

Entre los agredidos físicamente por los agentes policiales estuvieron un camarógrafo de la cadena CNN, a quien arrebataron su casco blindado, y un fotógrafo de la AFP.

La congresistas cubanoamericana Ileana Ros-Lehtinen, promotora de la Ley NICA en el Congreso para sancionar al régimen de Ortega, criticó duramente las restricciones impuestas por el gobierno contra los manifestantes.

Algunos de los autoconvocados afirmaron que la Policía capturó a cerca de una veintena de manifestantes, y se los llevaron en sus camionetas.

Vecinos del barrio Riguero afirmaron que una cantidad no específica de manifestantes lograron escapar saltando los muros de sus casas.

La Policía Nacional había advertido en la víspera que las protestas contra Ortega son "ilegales", y acto seguido organizaciones humanitarias señalaron que la legislación local sí acepta las manifestaciones como un derecho constitucional.

La oficina del Alto Comisionado de la Naciones Unidas para los
Derechos Humanos (Acnudh) ha responsabilizado al Gobierno de Ortega
por "más de 300 muertos", así como por ejecuciones extrajudiciales,
torturas, obstrucción a la atención médica, detenciones arbitrarias,
secuestros, violencia sexual, entre otras violaciones a los derechos
humanos.

El Gobierno nicaragüense niega los señalamientos y contabiliza solo 199 fallecidos.

Las manifestaciones contra Ortega y su esposa, la vicepresidenta
Rosario Murillo, iniciaron por unas fallidas reformas de la seguridad social y se convirtieron en una exigencia de renuncia del mandatario, después de 11 años en el poder.

(Con información de EFE y redes sociales)