Aplazan voto de plan republicano contra abismo fiscal

  • Agencias

El presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., el republicano John Boehner

El plan incluye la extensión de las exenciones fiscales para aquellos contribuyentes que ganen hasta un millón de dólares al año
La Cámara de Representantes de EE.UU. aplazó el voto previsto para el jueves sobre el plan republicano para evitar el "abismo fiscal" por falta de los votos necesarios, reporta Efe.

En un breve comunicado, el presidente de la Cámara baja, el republicano John Boehner, indicó que el plan, que incluye recortes de impuestos para las rentas de hasta un millón de dólares y al que se oponen los demócratas, "no tenía suficientes apoyos" de sus "miembros para ser aprobada".

Esta medida deja en suspenso cuál será el próximo paso en las negociaciones sobre el "abismo fiscal", una subida generalizada de impuestos y masivos recortes al gasto público pactados en 2011 para reducir el déficit, que entrarán en vigor en enero próximo si republicanos y demócratas no llegan a un acuerdo en el Congreso.

El "plan B" republicano incluye la extensión de las exenciones fiscales para aquellos contribuyentes que ganen hasta un millón de dólares al año.

Pero el plan republicano afronta la amenaza del veto del presidente de EE. UU., Barack Obama, quien insiste en que las rentas por encima de los 400.000 dólares anuales paguen más impuestos.

Los recortes tributarios que han provocado la discordia entre el Congreso y la Casa Blanca fueron instituidos en 2001 y 2003 durante la presidencia de George W. Bush y vencen el próximo 31 de diciembre.

De no llegarse a un acuerdo antes de fin de año se calcula que las familias de clase media afrontarían un aumento promedio de impuestos de 2.200 dólares anuales en 2013.

Los republicanos quieren que el pacto para reducir el déficit se centre en la reducción del gasto público, especialmente en programas sociales cuyo coste se dispara como Medicare, el programa médico para jubilados, que consideran insostenible.

El Senado, bajo control demócrata, ya había aprobado su propia medida que prorrogaría los recortes de impuestos con un tope de 250.000 dólares de ingresos anuales y se esperaba que rechazara el "Plan B".