Jorge Gómez Barata lamentó que "la prensa se mantenga al margen de estos asuntos", pues la "secretividad" impide "la socialización del conocimiento y la elaboración de los consensos necesarios".
El periodista cubano especializado en temas de política internacional Jorge Gómez Barata solicitó este viernes a Raúl Castro "avanzar" en su prometida reforma migratoria y dijo que la ausencia de debate en la prensa de la isla impide elaborar "los consensos necesarios" sobre el tema.
"Las autoridades cubanas reconocen la necesidad de actualizar la legislación migratoria (...). Ciertamente los asuntos son de gran complejidad aunque tampoco es preciso resolverlos todos de una sola vez (...). Lo importante es avanzar y avanzar", escribió Jorge Gómez Barata en el blog Cubano1erplano.
El analista quien es un partidario del gobierno comunista que publica comentarios en varios medios digitales, lamentó que "la prensa se mantenga al margen de estos asuntos", pues la "secretividad" impide "la socialización del conocimiento y la elaboración de los consensos necesarios", publicó la agencia de noticias France Press.
El 13 de abril el presidente del Parlamento cubano Ricardo Alarcón dijo al sitio digital rebelion.org que el país pondrá en marcha "una reforma migratoria radical y profunda en los próximos meses" para darle fin a las restricciones que le han impedido a los cubanos durante décadas viajar al exterior.
Los cubanos residentes en la isla enfrentan desde hace medio siglo restricciones para poder salir libremente de su país pues requieren un permiso de salida que, a un costo de 150 dólares, se otorga por 30 días prorrogables 10 veces, luego deben regresar sino pierden el derecho a residir en su país.
"La buena voluntad no podrá omitir el hecho de que existen cubanos radicados en el extranjero que han participado en acciones violentas contra el país", comentó Gómez Barata con respecto a los anticastristas radicales, publicó AFP.
El periodista anotó que "al legislar respecto a los cubanos radicados en el extranjero habrá que considerar su participación en los procesos económicos nacionales, tanto si regresan al país como si permanecen fuera y considerar los derechos de sus descendientes radicados en Cuba".
Agregó que tampoco "podrá omitirse ciertos asuntos políticos como es la participación en los procesos políticos nacionales, especialmente en los electorales".
Aunque estimó que estos cambios "no pueden significar un estímulo a la emigración, lo cual atentaría contra el interés nacional, como tampoco impedirla, lo que contradeciría derechos individuales", concluyó la fuente.
"Las autoridades cubanas reconocen la necesidad de actualizar la legislación migratoria (...). Ciertamente los asuntos son de gran complejidad aunque tampoco es preciso resolverlos todos de una sola vez (...). Lo importante es avanzar y avanzar", escribió Jorge Gómez Barata en el blog Cubano1erplano.
El analista quien es un partidario del gobierno comunista que publica comentarios en varios medios digitales, lamentó que "la prensa se mantenga al margen de estos asuntos", pues la "secretividad" impide "la socialización del conocimiento y la elaboración de los consensos necesarios", publicó la agencia de noticias France Press.
El 13 de abril el presidente del Parlamento cubano Ricardo Alarcón dijo al sitio digital rebelion.org que el país pondrá en marcha "una reforma migratoria radical y profunda en los próximos meses" para darle fin a las restricciones que le han impedido a los cubanos durante décadas viajar al exterior.
Los cubanos residentes en la isla enfrentan desde hace medio siglo restricciones para poder salir libremente de su país pues requieren un permiso de salida que, a un costo de 150 dólares, se otorga por 30 días prorrogables 10 veces, luego deben regresar sino pierden el derecho a residir en su país.
"La buena voluntad no podrá omitir el hecho de que existen cubanos radicados en el extranjero que han participado en acciones violentas contra el país", comentó Gómez Barata con respecto a los anticastristas radicales, publicó AFP.
El periodista anotó que "al legislar respecto a los cubanos radicados en el extranjero habrá que considerar su participación en los procesos económicos nacionales, tanto si regresan al país como si permanecen fuera y considerar los derechos de sus descendientes radicados en Cuba".
Agregó que tampoco "podrá omitirse ciertos asuntos políticos como es la participación en los procesos políticos nacionales, especialmente en los electorales".
Aunque estimó que estos cambios "no pueden significar un estímulo a la emigración, lo cual atentaría contra el interés nacional, como tampoco impedirla, lo que contradeciría derechos individuales", concluyó la fuente.