La oficina de prensa de la Casa Blanca ha dado a conocer este martes un memorando presidencial, dirigido a todos los jefes de departamentos y agencias del gobierno, donde se expone la política internacional de la administración Obama en relación a la sociedad civil en todo el mundo, la cual manifiesta que se trata de un interés nacional para establecer relaciones con las personas tanto como con los gobiernos de otros países del mundo, ya que la participación de la sociedad civil es fundamental en los gobiernos democráticos.
Por lo tanto, “la participación en el exterior de las agencias estadounidenses consistirá en consultar a los representantes de la sociedad civil de esos países para explicar los puntos de vista de los Estados Unidos sobre temas concretos, conocer sus perspectivas, utilizar sus conocimientos y generar una sólida alianza para abordar retos comunes”, destaca la nota de prensa.
“Cuando se viaja al extranjero, los funcionarios de los organismos que trabajan en el exterior deben buscar oportunidades para reunirse con representantes de la sociedad civil, especialmente en aquellos países donde enfrentan restricciones para realizar su trabajo, y puedan beneficiarse de un apoyo internacional sólido así como de la solidaridad”, precisa el memorando presidencial.
El memorándum insiste en que cada agencia comprometida en el exterior deberá incorporar e incluso llegar a la sociedad civil como parte de su participación internacional.
En ese sentido, el documento reitera que el gobierno de EE.UU. debe trabajar con organizaciones de la sociedad civil incluso cuando las leyes locales restringen la capacidad de las organizaciones de la sociedad civil para operar, o que las leyes de esos países no permiten el ejercicio de las libertades fundamentales de expresión, reunión y asociación pacífica, teniendo debidamente en cuenta la seguridad de los interlocutores de la sociedad civil y sus operaciones.
“Los organismos que trabajan en el exterior se opondrán, a través de los medios adecuados, a los esfuerzos de los gobiernos extranjeros para dictar la naturaleza de la ayuda estadounidense a la sociedad civil, así como la selección de las personas o entidades para aplicar programas del gobierno de Estados Unidos o la selección de los beneficiarios de dichos programas”.