El Observatorio de Periodistas Independientes de Nicaragua da a conocer en un reciente informe que la situación de la libertad de prensa se ha agravado con la alarmante cifra de 934 nuevas violaciones cometidas por el régimen Ortega/Murillo en los cinco meses transcurridos entre el 15 de julio y el 15 de diciembre de 2020.
El informe, elaborado por la organización de Periodistas y Comunicadores de Nicaragua (PCIN), revela que dicha institución “recibió la denuncia de 66 periodistas y comunicadores en su quehacer profesional. Las violaciones a los derechos humanos de periodistas y profesionales de la comunicación corresponde a 28 tipos de delitos y se dieron en todos los departamentos del país”.
En el informe del PCIN queda reflejado que las zonas con más denuncias presentadas por agresiones son Managua, con 17; Matagalpa, que reportó 15 y León con 10, y agrega que estas agresiones “fueron cometidas por policías, paramilitares y fanáticos del gobierno” y van desde el asedio y la obstaculización hasta la tortura sicológica, las amenazas, la intimidación y el desprestigio, entre otras.
En algunos municipios, explica el PCIN, son los “operarios políticos” del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) los encargados de detectar a los periodistas y vigilar a las personas que porten cámaras fotográficas.