Negocios entre Ecuador e Irán girarían en torno al uranio

Desde que Rafael Correa llegó al poder en Ecuador se ha empeñado en profundizar sus relaciones económicas con Irán.

Desde que Rafael Correa llegó al poder hace cuatro años se ha empeñado, pese a las advertencias internas y externas, en profundizar sus relaciones económicas con Irán, una relación que podría traerle más problemas que puntos de conveniencia.

Como en la célebre novela epistolar de Choderlos de Laclos, ese vínculo podría convertírsele al gobierno de Correa en Amistades Peligrosas, pues Irán es un país que tiene pésimas relaciones no sólo con los EE.UU., el principal socio comercial de Ecuador, sino también con países de la Unión Europea, a la que el país sudamericano está tratando de acercarse en las últimas semanas.

Durante su gobierno Rafael Correa ha viajado a Teherán (algo que inquietó a los EE.UU. en su momento) para firmar acuerdos de cooperación, y en estos cuatro años le ha propuesto inversiones en varios ramos a Irán, sin mucho éxito de materializarse hasta el momento.

Ahora el embajador de Irán en Ecuador, Majid Salehí, ha dicho el lunes 6 de junio que quiere impulsar proyectos bilaterales, sobre todo con la creación de una empresa mixta para invertir en Ecuador. Aunque Salehí aclaró que no había intereses en ningún sector específico, reiteró que "lo importante es invertir en Ecuador".

El funcionario iraní expresó que la decisión para crear una empresa conjunta de inversiones ya estaba tomada. Y habló de un documento firmado en la última sesión de la Comisión Conjunta Económica celebrada en Quito. En unas declaraciones que inquietaron a muchos empresarios, el funcionario iraní comentó: "Irán ha venido a un país amigo, a darle la mano, a ayudar a un gobierno hermano en todo lo que pueda y recibir ayuda en todo lo que se pueda".

Pero tanto altruismo no convence al industrial y experto en temas petroleros, Augusto Tandazo. Cuando se le pregunta cuál es el interés de Irán en invertir en Ecuador, comenta con cierto sarcasmo: "Por una sencilla razón, mi amigo, hay que saber mirar más allá de las cosas. ¿Por qué Irán se da el lujo de venir allende los mares, casi desde otro mundo? Porque tenemos uranio, por eso está aquí con mucho interés, porque sin uranio no hay energía nuclear, y su proyecto nuclear se le cae. Vienen por uranio, es más están trabajando en una especie de concesión para trabajar en 15.000 kilómetros cuadrados en la parte sur del Ecuador. Eso es lo que busca Irán, pero siempre vienen tomándonos del pelo".

Entre el 24 y 28 de noviembre de 2008 Ecuador presentó en Brasil un proyecto durante el encuentro denominado "Desarrollo de actividades sobre el ciclo de producción de uranio", en el que tanto el Ministerio de Electricidad y Energía Renovable (MEER) y la Subsecretaría de Control, Investigación y Aplicaciones Nucleares (Scian) explicaron los planes de explotación de este mineral.

En ese documento se plantea la posibilidad de desarrollar energía nuclear para Ecuador durante los próximos quince años, siempre que exista la decisión política de hacerlo. El proyecto plantea la necesidad de desarrollar un programa "intenso de exploración de minerales radioactivos", y hace énfasis en puntos como la importancia de la seguridad para explotar recursos uraníferos y obtener "uranio enriquecido".

Un cuadro de favorabilidad geológica-uranífera estableció cinco áreas con "favorabilidad uranífera"en Ecuador. Estas son, a saber: El Limo-Catamayo (Loja), Cuenca, Tena-La Barquilla (Napo-Pastaza), Macas (Morona) y Zamora.

Esta información soporta la teoría del experto Agustín Tandazo, quien cree que Ecuador se está metiendo en camisa de once varas al buscar estos convenios con Irán. "Mire lo que acaba de pasar con las relaciones entre Bolivia y Argentina, suspenden la visita de Evo Morales a Argentina porque lo recibieron algunos de los ministros iraníes. Irán es un país que está siendo señalado, no por EE.UU., sino por la comunidad internacional. Por una actitud provocadora en términos de una amenaza terrorista mundial".

La preocupación de los empresarios ecuatorianos se ha hecho sentir con más fuerza, sobre todo cuando piensan que al país andino aún no lo sacan de la lista gris del GAFI.