MUEREN 8 CIVILES Y UN TERRORISTA EN LA TOMA DE UNA ESCUELA EN RUSIA

Terroristas con explosivos atados al cuerpo se apoderaron el miércoles de una escuela secundaria en Osetia del Norte, región de Rusia limítrofe con Chechenia, tomaron en rehén a unas 400 personas, la mitad de ellas niños, y amenazaron con destruir el edificio el cual dijeron que estaba totalmente minado.
Ocho civiles y un terrorista murieron, informaron fuentes del hospital local de esa república rusa del Cáucaso que tiene frontera con la separatista Chechenia.
Por lo menos dos personas murieron en los primeros momentos del asalto. Una de las víctimas fue el padre de un alumno que opuso resistencia a un terrorista, dijo The Associated Press citando a fuentes gubernamentales.
La administración del hospital dijo que un civil murió durante el ataque al colegio y otros siete que resultaron heridos en el tiroteo fallecieron posteriormente.
Uno de los terroristas fue muerto a tiros por un policía que protegía la escuela.
Una vez que controlaron la escuela, los terroristas amenazaron con matar a 50 niños por cada uno de los asaltantes que fuera abatido y a otros 20 menores por cada terrorista que fuera herido, informó el Ministro del Interior de Osetia del Norte, Kazbek Dzantiev.
Las fuentes del gobierno de Moscú que informaron de este hecho agregaron que el asalto ocurrió antes de la ceremonia previa al comienzo del primer día del ciclo escolar cuando los terroristas llegaron en un camión cubierto, del tipo empleado frecuentemente para trasportar tropas.
La escuela asaltada da enseñanza del primer al onceno grados y en un día inaugural como el del miércoles se daba por sentado que muchos padres y madres acompañarían a sus hijos en su primer día de clases.
La agencia rusa de noticias ITAR-Tass dijo que los asaltantes dejaron en libertad a 15 niños varias horas después. Ninguna otra fuente de información corroboró esta afirmación.
En Moscú se informó que el presidente Vladimir Putin interrumpió el día de descanso que disfrutaba en el balneario de Sochi, en la costa del Mar Negro, y regresó inmediatamente a la capital cuando se le informó lo ocurrido. En cuanto llegó al aeropuerto de Moscú sostuvo una reunión con los jefes del Ministerio del Interior y del Servicio Federal de Seguridad, dijo la agencia Interfax.
Alexei Polyansky, portavoz de la policía en Rusia meridional, dijo que los terroristas amenzaron con destruir la escuela con explosivos si la policía intentaba recuperarla. Obligaron a los niños a pararse delante de las ventanas, dijo Polyansky.