Los problemas que enfrentan los ucranianos que no aceptan la ciudadanía rusa

El presidente ruso Vladimir Putin el 18 de abril de 2023 en Luhansk, en el este de Ucrania. (Pool photo via AP).

El presidente ruso Vladimir Putin firmó en abril un decreto que establece un procedimiento simplificado para emitir pasaportes rusos a los residentes de las áreas ocupadas por Rusia en las regiones ucranianas de Zaporizka, Khersonska, Donetska y Luhanska, informó la ONG Human Rights Watch en un comunicado de prensa.

El decreto dice que "los ciudadanos ucranianos o aquellos con pasaportes emitidos por la autoproclamada República Popular de Luhansk y la República Popular de Donetsk serán considerados ciudadanos extranjeros si no obtienen pasaportes rusos antes del 1 de julio de 2024".

"Estas nuevas reglas dejan a los ciudadanos ucranianos en riesgo real de ser deportados de sus propios hogares en violación del derecho internacional", advirtió Human Rights Watch.

El decreto es "el siguiente paso" del proceso acelerado de "pasaporteización" que Rusia puso en marcha "para los residentes de los territorios ocupados de Ucrania desde febrero de 2022".

Aquellos que dudan en solicitar un pasaporte ruso "caen rápidamente bajo el escrutinio de las autoridades de ocupación", señaló Human Rights Watch. "Al igual que en Crimea", después de la ocupación rusa en 2014, pueden esperar amenazas y enfrentar discriminación, incluso en el acceso a atención médica o servicios sociales.

La ONG destacó que las autoridades de ocupación tienen listas de personas "poco confiables", que incluyen a aquellos que no se han registrado para recibir pagos sociales o no han solicitado un pasaporte. "Se percibe que es probable que se opongan a la ocupación y están sujetos a controles regulares y otras presiones".

Human Rights Watch explicó que como potencia ocupante, Rusia está obligada a cumplir con el derecho internacional humanitario. "La potencia ocupante no adquiere soberanía sobre el territorio ocupado y, en general, debe respetar las leyes vigentes. Los civiles de los territorios ocupados conservan todas las protecciones previstas por el derecho internacional y no se les puede obligar a renunciar a sus derechos. Rusia tiene obligaciones jurídicas internacionales para garantizar la protección de los derechos de todos en los territorios ocupados", subrayó la ONG.