La escarpada senda de José Fernández

El joven pitcher cubano José Fernández inicia una excelente temporada con los Marlins, de la Florida.

¿Llegará al fin, en su segunda patria chica, el primer éxito del muchacho de Santa Clara? Condiciones tiene para ello, solo necesita paciencia… y, por favor, una ayuda de sus compañeros.
Nació con el sino de andar siempre cuesta arriba. Por eso, a sus 15 años, José Fernández debió montarse en un bote en busca de una vida mejor –de Villa Clara a la Florida--, y hasta saltar al agua en medio de la travesía para rescatar a su madre, arrojada al mar por el latigazo de una ola.

Cinco años después alcanzó un sueño, lanzar en la pelota de Grandes Ligas, pero si su talento lo llevó al Big Show, si debutó mimado por los elogios de los expertos, cuatro aperturas con la franela de los Marlins no le han sido suficientes para conquistar su primer triunfo desde la lomita.

En su salida más reciente, este martes en el estadio de los Mellizos, soportó 38 grados Fahrenheit de temperatura –para un cubano, son unos insólitos 3,3 centígrados—y perdió el partido en el cuarto inning, con tres lanzamientos.

Fue cuando Marlins tenía ventaja de 2-1. Chris Parmalee y Trevor Plouffe pegaron sencillos, escena propicia para un jonrón de Oswaldo Arcia, el primero del toletero zurdo en las Mayores, y el primero además que permite el cubano.

Fernández trabajó cinco innings, con cuatro anotaciones y seis hits a su expediente, un pelotazo, dos ponches y un balk, también el primero que comete. Después del juego, el tirador derecho atendió durante 30 minutos al video del juego que le mostró el entrenador de pitcheo, Chuck Hernández, y aceptó que algunos lanzamientos suyos estuvieron mal colocados.

El criollo había debutado el 7 de abril, como visitante de los Mets de Nueva York. Dejó el juego 3-1 a su favor, en cinco episodios, ponchó a ocho, pero sus manejadores no quisieron llevarlos más allá de 80 lanzamientos, y el bull pen de Miami lo estropeó todo.

El 13 de abril, por primera vez en La Pequeña Habana, el villaclareño impulsó con un hit una carrera de su equipo y se fue a las duchas con ventaja de 1-0 sobre Filadelfia. Era el sexto inning, había tolerado dos imparables, pero su relevo toleró el empate, y aunque Miami ganó, Fernández se fue sin decisión.

Su primer revés apareció el 18 de abril, como visitante de los Reds. Seis imparables y tres boletos, en cuatro innings, se convirtieron en cuatro anotaciones para el Cincinnati.

Y ya usted conoce la historia más reciente, bajo el gélido viento de Minnesota. No apareció la primera victoria del veinteañero, que --¡vaya algo a su favor!— obvió su paso por el nivel Doble A en virtud de que dos abridores de los peces sufrieron repentinas lesiones a punto de iniciar la temporada. Hasta ese momento, José Fernández, 6’2’’ de estatura y 240 libras de peso, exhibía marca de 14-1 y 1,75 de efectividad en 25 pleitos de Ligas Menores.

Marlins descansa hoy, para después disputar seis choques en sucesión, cuatro ante Chicago Cubs y dos frente a los Mets, todos en Miami. ¿Llegará al fin, en su segunda patria chica, el primer éxito del muchacho de Santa Clara?
Condiciones tiene para ello, solo necesita paciencia… y, por favor, una ayuda de sus compañeros.