Senado allana camino para confirmación de Hagel

Chuck Hagel.

Legisladores republicanos han rechazado a Hagel alegando que no está completamente comprometido con Israel y por no ser muy enérgico con el programa nuclear iraní
El Senado allanó este martes el camino para la confirmación de Chuck Hagel como próximo secretario de Defensa después que los republicaos abandonaron su dilación sin precedentes para aprobar al nominado por el presidente Barack Obama para dirigir el Pentágono.

En una votación de 71 a 27, el Senado puso fin a una táctica dilatoria republicana, dejando el escenario listo para la esperada confirmación del dos veces ex senador republicano por Nebraska en las próximas horas. Dieciocho republicanos se sumaron a 51 demócratas y dos independientes para llevar adelante la contenciosa nominación.

Si lo confirman, Hagel reemplazará a Leon Panetta al frente del Departamento de Defensa y se unirá al nuevo equipo de seguridad nacional, compuesto por el secretario de Estado, John Kerry, y el director designado de la CIA, John Brennan.

La nominación de Hagel dividió profundamente al Senado. Los republicanos criticaron duramente su antiguo colega y los demócratas respaldaron al nominado de Obama.

Harry Reid, líder de la mayoría demócrata en el Senado, expresó qué había logrado la dilación para "mis colegas republicanos".

"Doce días después, nada. No ha cambiado nada", dijo el demócrata por Nevada en el pleno del Senado. "La trayectoria ejemplar del senador Hagel a su país sigue impoluto".

Reid culpó al partidismo por la demora en aprobar al nominado de Obama. Tanto Reid como el presidente de la Comisión de Servicios Armados del Senado, Carl Levin, demócrata por Michigan, advirtieron que era imperativo actuar pocos días antes de que la ola de reducciones automáticas de gastos golpee al Pentágono.

"El Pentágono necesita un líder experimentado para implementar esas reducciones", dijo Reid.

Los republicanos alegaron que aunque Hagel -el senador Jim Inhofe lo calificó de "héroe"-había servido con distinción, su historial sobre Israel, Irán y las armas nucleares lo descalificaba para dirigir el Pentágono. La semana pasada, 15 senadores republicanos enviaron a Obama una carta pidiéndole que retirara la nominación de Hagel.

El senador Dan Coats, republicano por Indiana, citó las vacilaciones de Hagel en su audiencia de confirmación y sus declaraciones erróneas de que Estados Unidos tiene una política de contención frente a Irán, en vez de una política dirigida a frustrar las ambiciones nucleares de Teherán.

"(Hagel) tiene un desconocimiento vergonzoso de nuestra política sobre Irán", aseveró Coats.

Durante las tormentosas siete semanas que ha durado la batalla por la nominación de Hagel, los republicanos, liderados por el senador Ted Cruz, que cumple su primer término, e Inhofe, han insinuado que Hagel tiene una relación acogedora con Irán y recibió pagos de grupos extremistas o radicales por discursos. Esos comentarios provocaron una respuesta de los demócratas y algunos republicanos.

Levin desestimó los "rumores injustos" contra Hagel y lo calificó de un "destacado patriota estadounidense" cuyo historial como soldado enviaría un mensaje positivo a los hombres y mujeres de las fuerzas armadas de la nación.

El presidente no se ganó ningún punto con los republicanos por nominar al dos veces senador. Legisladores republicanos han repudiado a Hagel, alegando que es demasiado crítico con Israel y demasiado comprometido con Irán. Los republicanos presentan a Hagel como un radical muy alejado de los posturas más generalizadas.