Finaliza convenio médico entre Nairobi y La Habana sin noticias de doctores cubanos secuestrados en 2019

Los médicos cubanos secuestrados en Kenia, a la izquierda Assel Herrera y Landy Rodríguez. (Twitter)

Kenia anunció este miércoles que no renovará el acuerdo con La Habana para la contratación de médicos cubanos, un programa que ha sido criticado por el principal sindicato de galenos del país africano y que a puesto en peligro a, al menos, dos médicos cubanos.

En abril de 2019, el cirujano Landy Rodríguez Hernández y el especialista en medicina general Assel Herrera Correa fueron secuestrados en la ciudad keniana de Mandera (noreste), fronteriza con Somalia, por supuestos miembros del grupo yihadista somalí Al Shabab, afiliado desde 2012 a la red terrorista Al Qaeda. Desde entonces, se desconoce el paradero de los médicos cubanos, aunque los gobiernos de los países implicados han mencionado gestiones para liberarlos.

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El fin del convenio con Cuba fue anunciado por la ministra keniana de Salud, Nakumicha Wafula durante una reunión en Nairobi con trabajadores de la salud que recibieron la noticia con aplausos, según reportes de prensa.
La Comisión de Salarios y Remuneración de Kenia informó que cada médico cubano cobraba un salario mensual de unos 5.300 dólares, mientras que los médicos locales de la misma categoría recibían entre 1.600 y 2.300 dólares. Los médicos cubanos también recibían mejores viáticos, indica un despacho de Associated Press.

Tras el acuerdo bilateral entre La Habana y Nairobi, firmado en 2017 para mejorar el acceso a servicios sanitarios especializados en el país africano, un centenar de profesionales cubanos fue enviado a Kenia en 2018 y medio centenar de kenianos fueron enviados a Cuba para recibir instrucción especializada.

La medida fue duramente criticada en su momento por los legisladores y el Sindicato de Médicos, Farmacéuticos y Dentistas de Kenia, que dijeron que era un desperdicio de recursos cuando el país estaba luchando con miles de médicos y especialistas desempleados.

El sindicato afirmó que el dinero utilizado para pagar los elevados salarios de los médicos cubanos podría haberse empleado en contratar médicos kenianos o en comprar equipos médicos para los hospitales locales, que a menudo carecen de instalaciones y medicamentos básicos.