Estados Unidos revisa designación de Cuba como estado patrocinador del terrorismo

Banderas de Cuba y EEUU cuelgan en un balcón de La Habana.

El Departamento de Estado de EEUU reiteró este viernes que está revisando la política hacia Cuba y las decisiones tomadas en la administración anterior, incluida la de designar al régimen de La Habana como estado patrocinador del terrorismo.

El vocero Ned Price dijo en una conferencia de prensa telefónica que “cuando se trata de Cuba, la política se regirá por dos principios. Primero, está el apoyo a la democracia y los derechos humanos. Y segundo, que los estadounidenses, y especialmente los cubanoamericanos, son los mejores embajadores de la libertad y la prosperidad en Cuba”.

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Expresó que Estados Unidos está comprometido a hacer de los derechos humanos un pilar fundamental de su política exterior y eso, ciertamente, se aplica a Cuba.

Price informó que en la revisión de las decisiones políticas tomadas en la administración anterior “está incluida la decisión de la administración saliente de designar a Cuba como estado patrocinador del terrorismo”. Añadió que no quería entrar en más detalles al respecto.

Price hizo las declaraciones en respuesta a una pregunta de un periodista sobre la petición del máximo diplomático de la Unión Europa, Josep Borrell, al gobierno de Biden de que revierta la redesignación de Cuba como estado patrocinador del terrorismo por parte del expresidente Trump.

El pasado 28 de enero, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, ya había anunciado la revisión de la política de Estados Unidos hacia Cuba, así como en otras áreas de la seguridad nacional.

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Sin embargo, Psaki añadió que la administración seguiría su propio camino, y que no podía hacer predicciones al respecto.

El expresidente Trump tomó medidas drásticas contra Cuba después de asumir el cargo en 2017, acabando con la política de acercamiento con Cuba del presidente Barack Obama. Trump endureció las restricciones sobre los viajes y las remesas de Estados Unidos a la isla e impuso sanciones a los envíos de petróleo venezolano a La Habana.