El presidente egipcio anula la disolución del Parlamento

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El presidente egipcio Mohamed Mursi (d) charla con el vicesecretario de Estado de los EE.UU., William Burns (i), durante el encuentro que han mantenido en el palacio presidencial en El Cairo, Egipto, el domingo 8 de julio de 2012. EFE/Khaled Elfiqi

El decreto presidencial prevé "la organización de elecciones anticipadas para la Cámara, 60 días después de la aprobación por referéndum de la nueva Constitución del país"
El presidente egipcio Mohamed Mursi, investido en el cargo hace una semana, decidió el domingo por decreto anular la sentencia de la Alta Corte Constitucional que disolvía la Asamblea del Pueblo dominada por los islamistas y le devolvió el poder legislativo asumido por el Ejército.

"El presidente Mursi emitió un decreto presidencial anulando el fallo del 15 de junio de 2012 que disuelve la Asamblea del Pueblo e invita a la Cámara a reunirse nuevamente para ejercer sus prerrogativas", indicó la agencia oficial Mena.

La agencia AFP dijo que la decisión del primer presidente islamista y civil de Egipto puede avivar las tensiones con el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA), que se arrogó en junio el poder legislativo gracias a una decisión judicial denunciada como un "golpe institucional".

Según Mena, el CSFA mantuvo una "reunión urgente bajo la presidencia del mariscal Husein Tantaui para examinar las medidas presidenciales" del domingo.

El decreto presidencial prevé "la organización de elecciones anticipadas para la Cámara, 60 días después de la aprobación por referéndum de la nueva Constitución del país, y la adopción de una nueva ley que reglamente el Parlamento", según Mena.

No se ha fijado ninguna fecha para la redacción de la nueva Constitución posterior a la era Mubarak. La comisión de 100 miembros encargada de elaborar el documento se reunió por primera vez el 18 de junio y nombró a su cabeza a un juez reputado, Hosam al Ghariani.

El Parlamento egipcio fue disuelto por la aplicación de un dictamen judicial que lo declaraba ilegal, una medida cuestionada por los Hermanos Musulmanes, principal fuerza política de la Asamblea.

En su sentencia, la Alta Corte constitucional invalidó las elecciones legislativas que terminaron en enero, por un vicio jurídico en la ley electoral por la que se regían los comicios.

Estas elecciones se saldaron con un triunfo de los islamistas, con cerca de la mitad de los escaños para los Hermanos Musulmanes y casi una cuarta parte para los fundamentalistas salafistas.

A falta de Parlamento, el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, al que Hosni Mubarak entregó las riendas del país durante su dimisión en febrero de 2011, se arrogó el poder legislativo.

El CSFA anunció en junio en una "Declaración constitucional complementaria" que ejercería el poder legislativo hasta la elección de una nueva Asamblea del Pueblo. La misma Declaración daba derecho de veto al CSFA sobre cualquier artículo de la futura Constitución.

Los detractores del CSFA lo acusaron de haber orquestado la decisión judicial para arrogarse el poder legislativo y los Hermanos Musulmanes denunciaron un "golpe de Estado", afirmando que para ellos la Asamblea del Pueblo seguía siendo válida.

Al no poder ser investido ante el Parlamento, Mursi juró el 30 junio ante la Alta Corte constitucional.

Este domingo, el ex presidente de la Alta Corte constitucional, Faruk Sultan, tachó de "ilegal" el decreto presidencial.

El opositor Ayman Nur pidió por su lado a Mursi que respete las decisiones de la justicia y el diputado de izquierda Abu El Ezz al Hariri dijo que llevaría el caso ante la corte administrativa.

Este anuncio se produce antes de la reunión del consejo de la Shura de los Hermanos Musulmanes, de donde procede Mursi, y tras una visita a El Cairo del secretario de Estado adjunto estadounidense, William Burns, para entregar un mensaje del presidente Barack Obama al nuevo jefe de Estado egipcio.

Una fuente oficial que pidió el anonimato dijo este domingo a la AFP que Obama se reunirá con Mursi durante la Asamblea General de la ONU en Nueva York en septiembre. La secretaria de Estado, Hillary Clinton, visitará El Cairo el 14 de julio.

Estados Unidos ha recibido con reservas a Mursi, primer presidente egipcio que no sale de las filas militares. Siente alivio por las promesas de unidad nacional realizadas por él, y al mismo tiempo teme que sus relaciones con Egipto, un aliado desde hace 30 años, sean más complicadas que antes de la caída de Mubarak.