Culmina jornada electoral en Venezuela

Miles de caraqueños hacen cola hoy, 07 de octubre de 2012, durante la jornada de elecciones presidenciales que se está celebrando en Venezuela.

"Nosotros reconoceremos los resultados sean cual fueren", dijo Chávez tras emitir su voto.
La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, Tibisay Lucena, dio por concluida la jornada electoral a la que estaban convocados hoy aproximadamente 19 millones de ciudadanos para elegir al presidente que gobernará hasta 2019.

En una rueda de prensa, Lucena expresó la "satisfacción" del CNE por la celebración de una jornada "llena de tranquilidad y llena de alegría", aunque advirtió de que se permitirá que aquellas mesas en las que an hay afluencia de público permanezcan abiertas hasta que todos los ciudadanos ejerzan su derecho democrático.

Hugo Chávez aseguró que admitirá su derrota si Henrique Capriles, su más duro contrincante que ha enfrentado en los 14 años que lleva en el Gobierno, resulta vencedor en las elecciones generales del domingo, mientras el aspirante opositor afirmó que acatará la decisión de los votantes.

"Nosotros reconoceremos los resultados sean cual fueren", dijo Chávez a reporteros tras emitir su voto, informa AP.

Capriles dijo por su parte en conferencia de prensa que "lo que el pueblo diga hoy, eso para mí es una palabra sagrada". "Lo que el pueblo diga va a ser acatado por nosotros", resaltó Capriles al votar en un centro del este capitalino y agregó que la elección "es muy divertida porque es entre invictos".

Ni Chávez ni Capriles, quien ha sido alcalde y gobernador, han perdido comicios en el pasado cuando se trata de su elección directa.

Los centros de votación permanecían abiertos pasadas las 6 de la tardes, superando la hora límite que fijaron las autoridades electorales para cerrarlos.

Chávez había dicho temprano que debido a la masiva asistencia de electores era probable que se extendiera la hora de votación. Capriles se quejó a través de su cuenta de Twitter al respecto.

"Tenemos reporte de todos los centros del país y mayoritariamente no hay colas, es decir, ya deben cerrar", expresó el dirigente.

En las cercanías del palacio de Gobierno, en el centro de la capital, se observó una veintena de motorizados con franelas rojas, características de los seguidores del gobernante, recorriendo los alrededores.

El presidente de la Asamblea Nacional y dirigente del partido oficialista, Diosdado Cabello, llamó a los seguidores de Chávez a no adelantar las celebraciones en las calles.

El secretario ejecutivo del bloque opositor de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Aveledo, dijo en conferencia de prensa que según estimaciones de la oposición la asistencia de electores estaría por el orden del 70%.

Entre quienes aguardaban a Chávez en el centro electoral estaban la Premio Nobel de Paz de 1992, la guatemalteca Rigoberta Menchú, el actor estadounidense Danny Glover y la ex senadora colombiana Piedad Córdoba, todos abiertos simpatizantes del mandatario venezolano e izquierdistas reconocidos.

Los venezolanos se volcaron masivamente a los centros electorales. La presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, dijo en conferencia de prensa que "se observa a los venezolanos votando con gran tranquilidad, al igual que en el exterior".

El ministro de Defensa general Henry Rangel hizo un llamado a los militares a votar, un derecho del que gozan unos 200.000 uniformados desde 1999 por impulso de Chávez.

Sin dar detalles agregó que tenían identificadas a "algunas agrupaciones" que tenían previsto hacer "algunos eventos" al final de la tarde, pero que la "fuerza armada está preparada y equipada y adiestrada, motivada y con la conciencia necesaria para sofocar cualquier intento de desorden".

El jefe del Comando Estratégico Operacional, mayor general Wilmer Barrientos, dijo a la prensa que se registraron 15 delitos electorales cometidos por votantes que rompieron la tarjeta electoral y que fueron puestas a la orden de la Fiscalía. Agregó que tres personas murieron en tres distintas ciudades del país, pero en hechos sin relación con la jornada electoral.

Barrientos recorrió varios centros de votación en Caracas donde notó lentitud en el avance de las filas, lo cual reportó a las autoridades electorales.

La jornada de votación en algunos sectores de Caracas comenzó cerca de las 3 de la madrugada (0730 GMT), debido a que camiones recorrían las calles haciendo sonar el toque de diana, que se usa en los cuarteles militares para levantar a los soldados.

El comando de campaña de Chávez y el propio presidente, un teniente coronel retirado del Ejército y ex golpista, de 58 años, llevaban semanas diciendo que la hora de comenzar a levantarse y salir a la calle era las tres de la madrugada.

"No he podido dormir porque me puse a esperar la hora de votar", dijo a The Associated Press Freddy Araujo, un comerciante de 65 años, primero en la fila de un centro electoral de El Llanito, al este de Caracas, al que había llegado a las 3 de la madrugada.

En la fila de otro centro electoral en La Candelaria, en el centro de la capital, estaba Deyanira Duarte, un ama de casa de 39 años que también se levantó temprano porque vive en una apartada barriada.

"Me tuve que levantar a las 3 de la madrugada para ir a la parada" del autobús, dijo sonriente Duarte. "La cuestión (la elección) está bastante fuerte, hay un poquito de angustia por un lado y también por el otro", dijo en referencia a los dos candidatos.

Tanto el presidente Chávez, quien busca su tercera reelección, como Capriles, un abogado de 40 años, han convocado a votar pacíficamente.

Pero existen temores sobre eventuales incidentes debido, entre otras razones, a que Chávez nunca enfrentó a un rival que se le acercara tanto y el estrecho margen entre ellos genera gran expectativa, además de la retórica violenta usada por Chávez durante años.

Chávez ganó su segunda reelección en diciembre de 2006 con más de tres millones de votos de diferencia.

Unos 18,8 millones de venezolanos mayores de 18 años están inscritos para votar, incluidos 100.495 venezolanos residentes en el exterior.

En un país polarizado políticamente, los votantes dicen estar cansados de las divisiones.

"Estoy harta de que me insulten por la televisión", dijo a la AP Lissette García, una vendedora de ropa de 39 años al referirse a los términos como "escuálidos", "majunches" (de poco valor) y "oligarcas" que usan en el chavismo para definir a los opositores y críticos del gobierno, cosa que el ex coronel y sus seguidores han copiado al dedillo del régimen comunista de Cuba que empezó por llamar gusanos a sus opositores. "De verdad estoy cansada de la polarización", aseguró García.

Elsa Gutiérrez, un ama de casa de 52 años, dijo a la AP desde un centro electoral del estado occidental de Zulia que había votado por Capriles para que se termine esa división. "He sido víctima de exclusión en los programas sociales. Estuve inscrita en un comedor popular y por negarme a buscar 10 personas para votar por Chávez me sacaron del programa", agregó Gutiérrez.

Pero para simpatizantes del mandatario socialista, cuyo país controla las mayores reservas petroleras del mundo de unos 300.000 millones de barriles, según dijo Chávez en marzo pasado, la victoria del jefe de Estado está garantizada y significará la continuación de planes sociales y el camino más directo hacia comunismo estilo cubano.

Venezuela, donde viven 29 millones de personas, tiene una tasa de 50 homicidios por cada 100.000 habitantes según datos oficiales de 2011, uno de los niveles más altos de Latinoamérica, lo que también formó parte del pasado del país pero que se ha incrementado dramáticamente bajo el chavismo.

Para algunos analistas, quien sea que gane enfrentará duros retos porque la situación económica del país muestra signos preocupantes como una inflación de 18% acumulada en los últimos doce meses.

La victoria de Chávez "es probable", destacó Héctor Maldonado, profesor de Historia Latinoamericana de la Universidad Nacional de San Marcos, en Perú. "Pero tiene un panorama muy complicado por los problemas de su economía", agregó.

También existe el temor de que sectores de ambos bandos --pero sobre todo las milicias y paramilitares chavistas-- se nieguen a aceptar una victoria del contrincante.

"En un escenario de victoria de Capriles o incluso de victoria de Chávez, la primera forma de controvertir los resultados será la manera violenta", dijo en entrevista telefónica con la AP Juan David Cárdenas, profesor de Comunicación Política de la Universidad de La Sabana, en Bogotá.

Agregó que "desde las mismas campañas se ha alimentado el tema del fraude, de falta de transparencia. El ambiente de opinión está bastante caldeado".