Se trata de la Primera Iglesia Bautista La Trinidad, de Santa Clara, que se negó a obedecer una orden del gobierno para que no permitiera la presencia en el templo de disidentes.
Líderes religiosos en la ciudad de Santa Clara han condenado la negativa del gobierno cubano de permitirle a la Primera Iglesia Bautista La Trinidad acceso a su cuenta bancaria, según una denuncia formulada por Christian Solidarity Worldwide (Solidaridad Cristiana Mundial).
La denuncia es publicada en la página digital de la organización, dedicada a trabajar en pro de la libertad religiosa mediante la defensa de los derechos humanos y la justicia.
La información precisa que los depósitos bancarios suman aproximadamente $27 mil dólares y fueron congelados por el régimen en 2010 debido a que la iglesia se niega a prohibir la entrada al templo de disidentes, incluido el Premio Sajarov y residente en esa ciudad Guillermo Fariñas.
En una carta abierta publicada en 2010, quien por largo tiempo pastor de la iglesia, el reverendo Homero Carbonell, manifestó esperanzas de que tras su retiro el gobierno le descongelara los fondos a La Trinidad.
Pero de acuerdo con otro pastor bautista, el reverendo Mario Félix Lleonart Barroso, el retiro de Carbonell no tuvo el efecto esperado, y el dinero en su mayoría donado por iglesias en el extranjero para reparar el viejo templo que tiene 105 años sigue estando bloqueado más de dos años después.
A pesar de que el actual pastor, Juan Carlos Mentado, ha sido un “líder solícito” y ha cumplido con todos los requerimientos legales, señaló, el régimen todavía sigue castigando a la iglesia.
De acuerdo con la denuncia, la situación se ha hecho aún más difícil por el hecho de que las decisiones oficiales relacionadas con las organizaciones religiosas, como las de congelar cuentas bancarias, son adoptadas por la Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, “sin recurso de apelación”.
La nota dice además que todas las peticiones hechas a la jefa de esa oficina, Caridad Diego, para que se reconozca legalmente al seminario de la iglesia nunca han tenido respuesta.
La denuncia es publicada en la página digital de la organización, dedicada a trabajar en pro de la libertad religiosa mediante la defensa de los derechos humanos y la justicia.
La información precisa que los depósitos bancarios suman aproximadamente $27 mil dólares y fueron congelados por el régimen en 2010 debido a que la iglesia se niega a prohibir la entrada al templo de disidentes, incluido el Premio Sajarov y residente en esa ciudad Guillermo Fariñas.
En una carta abierta publicada en 2010, quien por largo tiempo pastor de la iglesia, el reverendo Homero Carbonell, manifestó esperanzas de que tras su retiro el gobierno le descongelara los fondos a La Trinidad.
Pero de acuerdo con otro pastor bautista, el reverendo Mario Félix Lleonart Barroso, el retiro de Carbonell no tuvo el efecto esperado, y el dinero en su mayoría donado por iglesias en el extranjero para reparar el viejo templo que tiene 105 años sigue estando bloqueado más de dos años después.
A pesar de que el actual pastor, Juan Carlos Mentado, ha sido un “líder solícito” y ha cumplido con todos los requerimientos legales, señaló, el régimen todavía sigue castigando a la iglesia.
De acuerdo con la denuncia, la situación se ha hecho aún más difícil por el hecho de que las decisiones oficiales relacionadas con las organizaciones religiosas, como las de congelar cuentas bancarias, son adoptadas por la Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, “sin recurso de apelación”.
La nota dice además que todas las peticiones hechas a la jefa de esa oficina, Caridad Diego, para que se reconozca legalmente al seminario de la iglesia nunca han tenido respuesta.