Cuba en el Consejo de Derechos Humanos: una burla

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Foto de archivo de Elliot Abrams.

Así lo considera Elliot Abrams, experto del Consejo de Relaciones Exteriores (CFR).
El 12 de noviembre serán elegidos los nuevos miembros del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU). Entre los candidatos figuran países a los que nunca se les debió permitir integrar el Consejo, como Cuba, Rusia, Arabia Saudita, China y Vietnam. La presencia de estos países hará que todo parezca una burla, escribió Elliot Abrams en la página del Consejo de Relaciones Exteriores, cfr.org.una organizacion independiente, no partidista.

Abrams plantea que tal vez Estados Unidos no puede impedir que estos países, con un pobre historial de derechos humanos sean elegidos. Sin embargo, señala que hay dos cosas que sí puede hacer.

En primer lugar, debe organizar un bloque que se oponga a la elección de estos cinco violadores de los derechos humanos. Incluso si no pueden lograr su objetivo, el hecho de que se obtengan varios votos en contra sería una vergüenza para ellos, que mostraría que muchos países condenan su desempeño en derechos humanos.

En segundo lugar, manifiesta Abrams, debemos anunciar que los Estados Unidos no respaldarán la candidatura de ninguno de ellos. El Consejo de Derechos Humanos de la ONU fue creado en 2006 por la Comisión de Derechos Humanos de la ONU y bajo la administración Bush, Estados Unidos se negó a formar parte de la organización hasta que demostró ser diferente. En 2009 el gobierno de Barack Obama anunció que iba a participar en la elección, y logró integrar el Consejo.

En su escrito, Abrams sentenció que "la incorporación de los violadores de derechos humanos como Cuba, Rusia, Arabia Saudita, China y Vietnam no hace que el Consejo sea más creíble (…) y si estos cinco países son elegidos, el Consejo se estará inclinando fuertemente hacia los abusadores, y Estados Unidos debe denunciarlo.

Elliott Abrams fue un alto funcionario del Consejo de Seguridad Nacional en la Casa Blanca durante el gobierno del presidente republicano George W. Bush. Actualmente, ofrece su punto de vista en el Consejo de Relaciones Exteriores sobre la política exterior de Estados Unidos, especialmente en cuestiones sobre la democracia y los derechos humanos en Oriente Medio.