111 años de trabajo para comprar un carro en Cuba

Venta de autos nuevos y usados en La Habana.

La parte más dificil para los nuevos compradores cubanos es justificar de dónde proviene el dinero y la falta de financiamiento para cubrir los exorbitantes precios.
La reciente liberación de la venta de carros nuevos y de uso por parte del Gobierno cubano ha nacido con muchos lazos en el cuello. He aquí algunos de ellos a los cuales usted tiene toda la libertad de agregarle otros:

1. Los precios. Un cubano con salario promedio (466 pesos casi 19 dólares mensuales) tardará aproximadamente 111 años para adquirir un vehículo de 25 mil CUC.

2. La justificación. Qué negocio, remesa o salario en Cuba puede respaldar la compra de un Peugeot nuevo de casi un cuarto de millón de CUC.

3. Los impuestos. Las excesivas recargas del gobierno (aproximadamente 50 por ciento por encima del valor real del vehículo) exceden ocho veces las cobradas por la mayoría de los comerciantes minoristas de gran parte del mundo (seis por ciento). Si a partir de este año los cubanos comienzan a pagar impuestos sobre el valor de la propiedad que poseen, ¿cuánto pagarán por estos vehículos?

4. El financiamiento. Hasta el momento no existe otra forma de adquirir los nuevos vehículos que no sea 'al contado', sin opciones para adquirirlos a crédito o mediante otras formas de pago.

5. Las cartas de autorización. Es una gran incógnita qué sucederá con aquellos cubanos que salieron a misiones con el sueño de tener su propio carro y hoy los precios para adquirir uno se les escapan de sus posibilidades económicas. También qué se harán aquellos que compraron a sobreprecio las cartas de autorización.

6. Las piezas de repuesto. A excepción de los Peugeot y los Geely, Cuba no cuenta con una infraestructura capaz de asegurar las piezas de repuesto para la mayoría de las marcas de autos que está vendiendo.

7. Las vías. Un gran por ciento de las vías al interior de Cuba (tanto la autopista nacional como la carretera central y otras) se encuentran entre regular y mal estado, lo cual aceleraría el deterioro de estos autos. El año pasado la Sección de Intereses de los Estados Unidos en Cuba advirtió a todos sus ciudadanos estadounidenses o cubanos residentes en EE UU que visiten la Isla “tomar las precauciones de seguridad al conducir para evitar problemas durante su estancia” en la isla.