Un satélite avanzado registra cambios en la gravedad de la Tierra

  • Jesús Rojas / Radio Martí
Las mediciones precisas de la gravedad tienen aplicaciones importantes en una variedad de campos.
El satélite europeo GOCE, que mapea el campo gravitatorio de la Tierra, se acercará aún más a nuestro planeta, descendiendo a niveles no alcanzados por otros satélites.

El vehículo espacial en forma de flecha ha estado gran parte de su misión a una altitud de 255 kilómetros, una altura 500 kilómetros inferior a la de otros proyectos de observación terrestre.

Los ingenieros bajarán ahora el satélite otros 20 kilómetros para mejorar la resolución de los datos obtenidos. Pero no será una maniobra fácil. GOCE deberá combatir la resistencia atmosférica para mantener la estabilidad necesaria para medir la gravedad.

"Las ventajas de disminuir la altitud para mejorar la resolución y precision de las mediciones son enormes", explicó a la BBC el administrador de la misión, Rune Floberghagen. Añade que "la calidad de los datos mejorará aproximadamente un 35%".

GOCE, acrónimo en inglés de Explorador estable del campo gravitacional y circulación oceánica, fue lanzado en 2009 y es parte de una serie de satélites innovadores de la Agencia Espacial Europea, ESA por sus siglas en inglés.

El satélite lleva a bordo instrumentos ultrasensibles para detectar pequeñas variaciones en la atracción gravitacional del planeta.

Las mediciones precisas de la gravedad tienen aplicaciones importantes en una variedad de campos.

Los datos suministrados por el satélite son utilizados para estudiar las corrientes marinas, los cambios del nivel del mar, la altura de la superficie terrestre y la profundidad de las montañas. También tiene aplicaciones en el campo de la ingeniería civil, para comparar alturas en diferentes sitios.

Uno de los éxitos recientes de GOCE fue producir el primer mapa global de alta resolución del borde entre la corteza terrestre y el manto superior, conocido como la discontinuidad de Mohorovcic o Moho, que se encuentra a decenas de kilómetros de profundidad.

Estudiar el interior de la Tierra puede ayudar a entender mejor los terremotos y erupciones volcánicas.

La razón de esas variaciones es en parte que el planeta no es perfectamente redondo, ya que está ligeramente achatado en los polos.

La gravedad también se ve afectada por las montañas, las fosas marinas profundas y el grosor y densidad de los estratos rocosos.