Convierten células de la piel en músculo cardíaco

  • Jesús Rojas / Radio Martí

Médicos especialistas del corazón

Científicos en Israel crearon en el laboratorio nuevo tejido cardíaco a partir de células madre de la piel para reparar daños en el corazón.
Aunque la reprogramación de células madre se está utilizando cada vez más para tratar diversos trastornos, como los neurodegenerativos, es la primera vez que se logra regenerar tejido cardíaco con células madre de pacientes enfermos.

Para el estudio los científicos tomaron células madre de la piel de dos hombres con insuficiencia cardíaca y las mezclaron con una combinación de genes y compuestos químicos para reprogramar el nuevo tejido cardíaco.

Cuando estas nuevas células fueron trasplantadas posteriormente a corazones de ratas comenzaron a integrarse con el tejido cardíaco sano.

Los resultados, --dicen los investigadores--, son "muy prometedores" para la reparación de la insuficiencia cardíaca.

Sin embargo, subrayan que uno de los principales obstáculos hasta ahora con la regeneración de células madre es que las nuevas células pueden comenzar a desarrollarse sin control y convertirse en tumores.

Por eso todavía deberán llevarse a cabo muchas más investigaciones antes de que este tratamiento esté disponible para pacientes con insuficiencia cardiaca u otros trastornos del corazón. Tal como afirman los científicos en la revista de la Sociedad Europea de Cardiología, como las células que se van a regenerar provienen del propio paciente, ello evita que el organismo rechace el tejido trasplantado.

Pero los investigadores del Laboratorio de Investigación Sohnis, el Instituto de Tecnología Technion-Israel y el Centro Médico en Haifa, subrayan que todavía falta superar varios obstáculos y más investigaciones antes que la técnica está disponible en la clínica.

"Lo que es nuevo y estimulante sobre esta investigación es que logramos demostrar que es posible tomar células de la piel de pacientes ancianos con insuficiencia cardiaca avanzada y finalizar con sus propias células cardíacas latentes en un plato de Petri", afirma el profesor Lior Gepstein, quien dirigió el estudio.