Francia y Reino Unidos decididos a combatir a EI

  • Agencias

David Cameron en la Cumbre del G20 en Australia.

Tanto en Londres como en París, las autoridades civiles mostraron su repudio al asesinato del trabajor estadounidense, convertido al islam, y expresaron su compromiso para acabar con el llamado Estado Islámico.

El primer ministro del Reino Unido, David Cameron, se mostró hoy "horrorizado" por "el asesinato a sangre fría" por parte del Estado Islámico en Siria del rehén estadounidense Abdul-Rahman Kassig.

En un mensaje en su cuenta de Twitter, Cameron, que asiste en Australia a la cumbre del G20, condenó el ataque sin paliativos. "Estoy horrorizado por el asesinato a sangre fría de Abdul-Rahman Kassig", dijo el jefe del Gobierno británico.

El rehén, anteriormente llamado Peter, se cambió el nombre en cautividad al convertirse al islam. El "ISIL (Estado Islámico de Irak y Levante, como Londres alude al Estado Islámico) ha mostrado una vez más su depravación", añadió el primer ministro, que expresó sus condolencias a la familia.

El primer ministro francés, Manuel Valls, aseguró hoy que la decapitación del rehén estadounidense Peter Kassig reafirma la voluntad de su país de luchar contra la organización del Estado Islámico (EI) en Irak y Siria. Valls "condena con la mayor firmeza este nuevo acto de barbarie", según un comunicado difundido por su oficina, en el que afirma que el primer ministro "conoció con espanto" el asesinato de Kassig y de varios soldados sirios que habían sido tomados como rehenes.

"Esta acción refuerza la determinación de Francia a actuar contra el Daech (acrónimo en árabe del EI) en Irak y Siria", agregó el jefe del Gobierno galo, antes de expresar sus condolencias a los familiares de las víctimas.