Un brote de COVID-19 en una constructora militar ha dejado decenas de nuevos casos de contagio en Cuba mientras las autoridades se afanan en poner en práctica medidas de vuelta a la normalidad.
Hasta el sábado, 13 de junio, habían sido confirmados 24 casos relacionados con el foco en la Unidad Constructora Militar "Antonio Lamoru Pistero", del Consejo Popular Arroyo Arenas, en La Lisa, a los que se suman ocho reportados este lunes en el parte diario del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), para un total de 32.
Cientos de personas que mantuvieron contacto con los enfermos de la constructora se mantienen bajo vigilancia.
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Otro brote reciente que preocupa a las autoridades capitalinas es el de la tienda de Carlos III, cuyo control fue abordado en el Consejo de Defensa Provincial el jueves pasado, reportó el diario local Tribuna de La Habana.
En la reunión “se aprobó la propuesta del cierre total de la tienda, realizar una desinfección durante 3 o 4 días seguidos” entre otras medidas. Las entregas en tienda y a domicilio de las compras virtuales también fueron detenidas.
Lee también Cuba: sin fecha de inicio plan de recuperación de 2 fases y 122 páginasSegún el diario, se tomaron muestras a los 520 trabajadores del centro comercial, residentes en 11 municipios de la capital, de los cuales tres son positivos hasta este momento.
El gobierno cubano anunció la semana pasada el regreso paulatino de la isla a la normalidad, con una serie de medidas a aplicarse en tres etapas, aunque no dio una fecha exacta de inicio para la primera de ellas, ni detalles exactos de cómo se implementará.
En una reunión de gobierno este sábado, el designado presidente Miguel Díaz-Canel dijo que las cifras de las dos últimas semanas permiten ratificar el criterio de que “vamos transitando hacia la recuperación”.