Arzobispo de Santiago pide a la Virgen de la Caridad lo mismo que piden los cubanos: corriente, comida y libertad

Mons. Dionisio García Ibáñez, arzobispo de Santiago de Cuba, en la Eucaristía del 24 de marzo de 2024, Domingo de Ramos.

En la Eucaristía del Domingo de Ramos, Monseñor Dionisio García Ibáñez, Arzobispo de Santiago de Cuba, pidió a la Virgen de la Caridad del Cobre, que los cubanos puedan tener una existencia “con más desahogo, una vida normal", y se hizo eco de las demandas de los manifestantes en las protestas del pasado 17 de marzo.

Al final de la ceremonia, celebrada en la Basílica Santuario Nacional consagrada a la Patrona de Cuba, Mons. García Ibáñez se dirigió a la Virgen y le dijo que venía a rogarle por lo mismo que piden la mayoría de los cubanos.

“Yo quiero pedirte lo que los peregrinos que vienen acá, que lo mismo que piden ante ti, es también lo que hablan en sus conversaciones, en sus hogares, entre los amigos (…). Es también lo que expresan de muchas maneras, porque los hombres estamos hechos para expresar nuestros sentimientos, nuestra manera de ver el mundo y para ser respetados por todos”, explicó el religioso.

Según el Arzobispo, la iglesia es el lugar indicado para hacer peticiones y expresar sentimientos, y por eso el pueblo se postra ante la Virgen de la Caridad, “porque es el amor, y nuestro pueblo quiere eso, quiere caridad y amor”.

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Nuestro pueblo pide y repite, "corriente y comida", ¿eso es inalcanzable?, se pregunta monseñor Dionisio García

Una vida normal, con “mayor desahogo, queremos vivir una vida normal, en la que cada cual pueda hacer su plan, su proyecto de vida, en que la vida no sea una lucha y un trabajo perenne” es, de acuerdo con Mons. García Ibáñez, un derecho y también una necesidad que tienen los cubanos.

Pidió también a la madre de Jesús poder “utilizar las horas de nuestro tiempo en la lectura, en la entrega, en el servicio”, porque, apuntó, “muchas veces las empleamos en la lucha cotidiana por conseguir lo imprescindible para vivir, que muchas veces escasea”, en clara referencia a la crisis que atraviesa el país.

Refiriéndose a la falta de energía eléctrica, que hace “las noches largas”, el Arzobispo de Santiago de Cuba rogó a la Virgen que interceda ante el Señor para que “por lo menos, nos dé energía interior”, porque “necesitamos tener un sosiego en la vida, que nuestros niños duerman bien y nuestros ancianos también, y nosotros, que mañana tenemos que trabajar".

"Por eso, hermanos, nuestro pueblo ha dicho, y repite, y eso todos lo sabemos, 'corriente y comida' . ¿Eso es inalcanzable?, ¿eso es pedir demasiado?", señaló el prelado.

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El religioso también se refirió al éxodo masivo que sufre la isla, porque los cubanos, dijo, no tienen lo imprescindible para vivir en ella y deben buscarlo en otros lugares.

“Nuestro pueblo también pide la libertad, ¿para qué?, pues para que cada cual pueda hacer de su vida su proyecto, y llevar a su familia a que sus hijos alcancen lo máximo, y todo eso la gente lo quiere hacer aquí”, aseguró.

Mons. García Ibáñez se hizo eco de los deseos de expresarse y opinar libremente que tienen los cubanos, y consideró una “pena” que esto no ocurra en la “tierra que Dios nos dio”. Reportes de organizaciones independientes señalan que durante las protestas del 17M varios manifestantes fueron detenidos.

Subrayó que los cubanos no quieren violencia, y “esto lo sabemos todos, porque es lo que nuestro pueblo pide y quiere”. A mediados de 2023, Mons. García Ibáñez se pronunció ante la escalada de violencia desatada en el país. "Que la vida honesta y segura que necesitamos y merecemos se adueñe de nuestras ciudades y hogares", pidió entonces en un mensaje a los fieles.

No es la primera vez que el Arzobispo de Santiago de Cuba intercede ante la Virgen de la Caridad para que conceda libertad y bienestar a los cubanos.

En julio de 2022, en el aniversario de las protestas del 11 de julio de 2021, Mon. el religioso elevó una plegaria a la Patrona de los cubanos para que moviera los corazones de "todos los que tienen en sus manos la posibilidad de modificar las situaciones", para que fueran revisadas todas las condenas de los cientos de detenidos y pudieran salir en libertad quienes solo quisieron expresar sus ideas durante las protestas que sacudieron al país.

“Lo he dicho en aquel momento y te lo vuelvo a presentar, madre”, recalcó entonces Mons. García Ibáñez.

El pasado jueves, en una Invitación a la Oración, el Obispo de Holguín, Mon. Emilio Aranguren Echeverría, pidió a los cubanos rezar por el país durante las celebraciones de la Semana Santa, para que "el Señor guíe sus pensamientos y decisiones hacia la paz y la libertad".