Aniversario 37 de la fundación de Radio Martí

Estudio de Radio Martí en Washington. Foto OCB.

Fue el pistoletazo de salida, la fecha que cambió la acostumbrada hegemonía de las ondas radiales en la Isla. El 20 de mayo de 1985 Cuba despertaba con la novedad. Había nacido Radio Martí. Una emisora desde tierras de libertad con el nombre del Apóstol; nombre traído al exilio por los desterrados que no cabían en aquella república.

El empeño tuvo dos personajes clave: Jorge Mas Canosa y Ronald Reagan. El primero, un acérrimo y abierto rival del sistema comunista, el segundo, el presidente de Estados Unidos que entendió, apoyó y financió el proyecto para que naciera la emisora.

La voz del doctor Humberto Medrano dio inicio a las transmisiones. El hombre cuyo padre había conocido en persona a José Martí, y quedara encantado con su verbo en favor de la independencia de Cuba, fue el encargado de darle los buenos días a los nuevos oyentes.

Las voces de los locutores Moisés López y Arístides Quinteros comenzaron a sonar. Empezaba la historia.

Cubanos atentos en la Isla escucharon entre absortos e ilusionados lo que poco a poco fue convirtiéndose en la rutina de sus hogares.

Los noticieros, los programas, la novela Esmeralda, Tres Patines, toda una mezcla deliciosa a los oídos de un pueblo que daba gracias, mientras maldecía la insoportable interferencia dándole vueltas a un radio con un perchero de alambre enredado en la antena.

El presentador Oscar del Río, quien dedicó 28 años de su carrera a Radio Martí, lo analiza así:“El 20 de mayo marca dos fechas históricas para Cuba, en 1902 comienza la República y 1985 marca un hito histórico con la emisora. Marca un antes y un después en la memoria del cubano en el sentido de que a partir de esa fecha se rompe el monopolio informativo que había tenido hasta ese momento el gobierno cubano”.

Luego, nada fue igual. El régimen no perdió tiempo en calificarla como “mal llamada Radio Martí”, como si el nombre del apóstol le perteneciera por decreto. Sintió que las mentiras eran descubiertas, que la propaganda perdía absolutismo y que sus emisoras se tornaban intrascendentes. Sus ataques se han vuelto tan antiguos como la misma fecha.

El periodista Alex Rivero, uno de sus fundadores, se precia de contar con 36 años de servicio.

“Se desarrollaron programas especiales como Cuba sin censura, que era una investigación a fondo de algunos temas que habían sido soslayados por el gobierno cubano, ahí se incluía una especie de sucursal del programa cuando altos funcionarios cubanos se quedaban y se le hacían entrevistas muy puntuales, y se pasaban en ese programa Cuba sin Censura”, recuerda Rivero.

La intervención militar cubana en otras tierras no ocupaba espacio en la prensa nacional, entretenida en loas al máximo líder y a las supuestas ventajas de la construcción del socialismo.

“Recuerdo también el aporte que hizo Radio Martí con destacar la parte militar de la presencia cubana en África, en Angola y Etiopía, porque los medios cubanos hablaban mucho de los aportes de Cuba pero civiles, pero había una parte militar que incluía obviamente bajas en enfrentamientos militares que el gobierno cubano tendía a soslayar”, agrega Rivero.

En 37 años Radio Martí ha sido el respaldo de los opositores castigados y sus familias. El lugar de refugio de ciudadanos humildes que ven atropellados sus derechos. El templo donde la verdad es noticia y viceversa. Generaciones dan testimonios de la eficacia de la emisora y de su labor de servicio. Los ejemplos de excelentes coberturas sobran: La masacre del Río Canímar, la del remolcador 13 de Marzo, la crisis de los balseros, la Base Naval de Guantánamo, las huelgas de hambre, la visitas papales a Cuba, como la de Juan Pablo II, el entierro de Zapata Tamayo, las palizas a las Damas de Blanco, y más recientemente el 11-J.

Es tiempo de festejar. Radio Martí cumple 37 años. ¡Enhorabuena!