El corazón de los astronautas se redondea en el espacio

  • Jesús Rojas / Radio Martí
"El corazón no hace tanto esfuerzo en el espacio, lo que puede generar pérdida de la masa muscular", dice James Thomas.
El corazón de los astronautas se redondea cuando pasan una larga temporada en el espacio, lo que podría causar problemas cardíacos, según un estudio de la Nasa.

El descubrimiento representa un paso importante en la comprensión de los efectos de la microgravedad en la fisiología cardíaca durante los viajes de 18 meses en adelante en el espacio, en la perspectiva de una misión tripulada a Marte, dicen los autores de este trabajo presentado en la conferencia anual del Colegio Americano de Cardiología, en Washington.

"El corazón no hace tanto esfuerzo en el espacio, lo que puede generar pérdida de la masa muscular", dice James Thomas, jefe científico de imágenes cardíacas y ultrasonido en la NASA y autor principal del estudio.

Para este estudio, los investigadores evaluaron a 12 astronautas de la NASA formados en la utilización de una máquina de ultrasonido para tomar imágenes de su corazón cuando se encontraban en la Estación Espacial Internacional (ISS), antes y después de su estancia en el espacio.

Las imágenes mostraron que sus corazones se habían redondeado en casi un 10% en condiciones de ingravidez, una transformación similar a la que los científicos habían previsto con un modelo matemático desarrollado para este proyecto.

Al validar este modelo de investigación, el estudio también podría conducir a una mejor comprensión de las enfermedades cardiovasculares en general con aplicaciones clínicas importantes, estimaron los investigadores.

Thomas señala que "podemos predecir cómo el corazón reacciona bajo diferentes situaciones de estrés".

La forma más esférica que adopta el corazón de los astronautas en el espacio desaparece rápidamente poco después de su regreso a la Tierra, dijeron los investigadores.

La deformación del corazón en microgravedad podría significar que funciona menos eficientemente, pero los efectos a largo plazo de este fenómeno sobre la salud del corazón siguen siendo desconocidos, reconocieron los investigadores.