De 2010 a 2012 disminuyó en casi dos tercios, según un informe del Departamento de Seguridad Nacional estadounidense.
El blog Café Fuerte reporta que Estados Unidos admitió como refugiados políticos a 1, 948 cubanos durante el año fiscal 2012, la cifra más baja en los últimos nueve años.
La bitácora cita el Informe Anual sobre Refugiados y Asilados 2012, divulgado por el Departamento de Seguridad Nacional, donde se refleja que el número de cubanos aceptados mediante el programa especial para refugio continuó decreciendo, aunque Cuba se mantiene entre los cinco países con mayor cantidad de nacionales beneficiados después de Bután, Myanmar, Irak y Somalia
En 2010 fueron admitidos como refugiados 4,818 cubanos. En 2011 la cifra se redujo a 2,920
La categoría de refugiado comprende solamente a personas que están fuera del territorio de Estados Unidos y pueden demostrar un fundado temor de persecución o represalias en su país por motivos de religión, raza, nacionalidad o pertenencia a un grupo político. Se incluyen tanto la persona directamente afectada como su núcleo familiar.
Café Fuerte señala que en el caso cubano son admitidos bajo el estatus de refugiados fundamentalmente disidentes, ex presos políticos, ex funcionarios y ex militares hostigados por el régimen, y médicos y otros profesionales de la salud en misiones internacionales..
En el período que abarca el informe, fueron aceptados una treintena de ex presos políticos de la Causa de los 75 que habían viajado a España desde mediados del 2010 por gestiones de la Iglesia Católica y el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Las estadísticas también reafirmaron la tendencia decreciente en el otorgamiento de asilo político entre los solicitantes cubanos durante la última década: sólo 24 peticiones fueron concedidas en 2012, apenas cuatro más que el año anterior.
Para pedir asilo, el solicitante debe hallarse en Estados Unidos y permenecer aquí mientras aguarda por el dictamen de un juez de inmigración. En el caso de los cubanos se ha hecho habitual que sus solicitudes de asilo sean desestimadas, pues los magistrados consideran que pueden regularizar su estatus en Estados Unidos al año y un día, bajo la Ley de Ajuste Cubano.
La legislación vigente desde 1966 permitió en contraste la permanencia de 9,545 cubanos que ingresaron a EE. UU. sin visas en el mismo período, de ellos, 9,191 por puntos fronterizos (8,273 a través de la frontera mexicana) y 354 por mar, en aplicación de la política de “pies secos y pies mojados”.
Estados Unidos no apoya la inmigración ilegal, sino una legal, ordenada y segura, que en el caso de los cubanos implementa mediante un mínimo de 20.000 visas anuales para inmigrantes, refugiados y las visas "parole" del Programa de Reunificación de la Familia Cubana que pueden gestionarse a través de la Sección de Intereses de EE.UU. en La Habana.
La bitácora cita el Informe Anual sobre Refugiados y Asilados 2012, divulgado por el Departamento de Seguridad Nacional, donde se refleja que el número de cubanos aceptados mediante el programa especial para refugio continuó decreciendo, aunque Cuba se mantiene entre los cinco países con mayor cantidad de nacionales beneficiados después de Bután, Myanmar, Irak y Somalia
En 2010 fueron admitidos como refugiados 4,818 cubanos. En 2011 la cifra se redujo a 2,920
La categoría de refugiado comprende solamente a personas que están fuera del territorio de Estados Unidos y pueden demostrar un fundado temor de persecución o represalias en su país por motivos de religión, raza, nacionalidad o pertenencia a un grupo político. Se incluyen tanto la persona directamente afectada como su núcleo familiar.
Café Fuerte señala que en el caso cubano son admitidos bajo el estatus de refugiados fundamentalmente disidentes, ex presos políticos, ex funcionarios y ex militares hostigados por el régimen, y médicos y otros profesionales de la salud en misiones internacionales..
En el período que abarca el informe, fueron aceptados una treintena de ex presos políticos de la Causa de los 75 que habían viajado a España desde mediados del 2010 por gestiones de la Iglesia Católica y el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Las estadísticas también reafirmaron la tendencia decreciente en el otorgamiento de asilo político entre los solicitantes cubanos durante la última década: sólo 24 peticiones fueron concedidas en 2012, apenas cuatro más que el año anterior.
Para pedir asilo, el solicitante debe hallarse en Estados Unidos y permenecer aquí mientras aguarda por el dictamen de un juez de inmigración. En el caso de los cubanos se ha hecho habitual que sus solicitudes de asilo sean desestimadas, pues los magistrados consideran que pueden regularizar su estatus en Estados Unidos al año y un día, bajo la Ley de Ajuste Cubano.
La legislación vigente desde 1966 permitió en contraste la permanencia de 9,545 cubanos que ingresaron a EE. UU. sin visas en el mismo período, de ellos, 9,191 por puntos fronterizos (8,273 a través de la frontera mexicana) y 354 por mar, en aplicación de la política de “pies secos y pies mojados”.
Estados Unidos no apoya la inmigración ilegal, sino una legal, ordenada y segura, que en el caso de los cubanos implementa mediante un mínimo de 20.000 visas anuales para inmigrantes, refugiados y las visas "parole" del Programa de Reunificación de la Familia Cubana que pueden gestionarse a través de la Sección de Intereses de EE.UU. en La Habana.