El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas condenó enérgicamente el martes la tercera prueba nuclear de Corea del Norte, y prometió tomar acciones contra Pyongyang por un acto que todas las potencias mundiales, incluso China, han denunciado.
"Los miembros del Consejo de Seguridad condenaron enérgicamente este ensayo, que es una violación grave de las resoluciones del Consejo de Seguridad", dijo a periodistas el ministro de Relaciones de Corea del Sur, Kim Sung-hwan, cuyo país preside el cuerpo durante este mes. Los 15 miembros del Consejo aprobaron el comunicado. Kim agregó que ahora el Consejo consideraría "medidas apropiadas".
La embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice, dijo que Washington y sus aliados intentan "incrementar" las sanciones aplicadas por los ensayos de Pyongyang en 2006 y 2009.
El comunicado del Consejo fue acordado en una reunión de emergencia a puertas cerradas. Diplomáticos dijeron que las negociaciones por nuevas sanciones podrían llevar semanas ya que China parece dispuesta a resistirse a estas medidas por temor a que otra ronda de medidas lleven a más represalias de Corea del Norte.
En Washington, el presidente Barack Obama conversó el martes con su par de Corea del Sur, Lee Myung-bak, en torno al "altamente provocativo" ensayo nuclear de Corea del Norte, y acordaron trabajar con el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para que maneje el tema, dijo la Casa Blanca en un comunicado.
"Acordaron trabajar conjuntamente, incluso en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidos, para buscar medidas destinadas a impedir los programas nucleares y de misiles balísticos de Corea del Norte, y reducir el riesgo de proliferación", dijo la Casa Blanca al referirse a la discusión de los líderes.
"El presidente Obama reafirmó de manera inequívoca que Estados Unidos sigue siendo categórico en sus compromisos de defensa a la República de Corea, incluyendo la extendida disuasión ofrecida por el paraguas nuclear de Estados Unidos", agregó la Casa Blanca.
"Los miembros del Consejo de Seguridad condenaron enérgicamente este ensayo, que es una violación grave de las resoluciones del Consejo de Seguridad", dijo a periodistas el ministro de Relaciones de Corea del Sur, Kim Sung-hwan, cuyo país preside el cuerpo durante este mes. Los 15 miembros del Consejo aprobaron el comunicado. Kim agregó que ahora el Consejo consideraría "medidas apropiadas".
La embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice, dijo que Washington y sus aliados intentan "incrementar" las sanciones aplicadas por los ensayos de Pyongyang en 2006 y 2009.
El comunicado del Consejo fue acordado en una reunión de emergencia a puertas cerradas. Diplomáticos dijeron que las negociaciones por nuevas sanciones podrían llevar semanas ya que China parece dispuesta a resistirse a estas medidas por temor a que otra ronda de medidas lleven a más represalias de Corea del Norte.
En Washington, el presidente Barack Obama conversó el martes con su par de Corea del Sur, Lee Myung-bak, en torno al "altamente provocativo" ensayo nuclear de Corea del Norte, y acordaron trabajar con el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para que maneje el tema, dijo la Casa Blanca en un comunicado.
"Acordaron trabajar conjuntamente, incluso en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidos, para buscar medidas destinadas a impedir los programas nucleares y de misiles balísticos de Corea del Norte, y reducir el riesgo de proliferación", dijo la Casa Blanca al referirse a la discusión de los líderes.
"El presidente Obama reafirmó de manera inequívoca que Estados Unidos sigue siendo categórico en sus compromisos de defensa a la República de Corea, incluyendo la extendida disuasión ofrecida por el paraguas nuclear de Estados Unidos", agregó la Casa Blanca.