El manuscrito que "se extravió" en Finca Vigía

Hemingway y Mary Welsh en Italia, en 1949, con dos periodistas italianos.

Una pareja canadiense une erudición e imaginación para reconstruir los últimos días del autor de "El viejo y el mar" en su hogar cubano.
Una pareja integrada por dos académicos canadienses ha publicado por sus medios una novela escrita a cuatro manos sobre los últimos días de Ernest Hemingway en Cuba, reporta el diario Welland Tribune de la provincia de Ontario.

Wayne y Eleanor Johnston se enamoraron de Hemingway por separado mientras cursaban el preuniversitario, a través del libro de memorias del narrador canadiense Morley Callaghan sobre el verano de 1929 en París, That Summer in Paris. Ese año fabuloso convivieron en la ribera izquierda del Sena luminarias de la literatura en lengua inglesa como F. Scott Fitzgerald, James Joyce y el propio Hemingway.

Hemingway’s Island, o “La isla de Hemingway” es narrada por dos de sus personajes: Mary Welsh, la última de las cuatro esposas del autor de El viejo y el mar, pone por escrito cada día de su última semana con el escritor en la finca La Vigía --el hogar de Hemingway cerca del suburbio habanero de San Francisco de Paula-- con la intención de enviar el texto a la revista Life.

Medio siglo después, Alf O’Malley, un joven graduado universitario canadiense, desembarca en La Habana de 2010 con su novia embarazada, y atraviesa azares, aventuras y desventuras en su búsqueda del supuesto manuscrito perdido de Mary.

La nota del Welland Tribune precisa que Wayne y Eleanor Johnston se conocieron en el Colegio Victoria de la Universidad de Toronto, en la década de los 70, cuando él cursaba una maestría en teología, y ella, una licenciatura en Inglés.

El Tribune agrega que Wayne, a quien su esposa describe como un verdadero almacén de conocimientos sobre Ernest Hemingway, fue la garantía de que la obra de ficción se ajustara lo más posible a la realidad histórica, mientras que Eleanor le aportó a la trama su fértil imaginación.