Activista LGBT: homosexuales cubanos acosados y discriminados

Marcha independiente por el Orgullo Gay en La Habana.

"Estamos empezando a entender cómo organizarnos de una manera más efectiva", dijo Leannes Imbert Acosta, coordinadora nacional de la plataforma cubana LGBT. Publica hoy el sitio digital Washington Blade.
Una líder cubana defensora de los derechos de las Lesbianas Gays Bisexuales y Transexuales, LGBT, dice que los activistas del país siguen sufriendo el acoso y la discriminación a pesar del alto perfil de las campañas oficialistas de la isla para aparentar lo contrario.

"Estamos empezando a entender cómo organizarnos de una manera más efectiva", dijo Leannes Imbert Acosta, coordinadora nacional de la plataforma cubana LGBT. Publica hoy el sitio digital Washington Blade.

La líder habló durante una mesa redonda sobre los derechos LGBT en Cuba, en el Centro de Investigación de Cultura Negra en Manhattan, este sábado. "Hay mayor tolerancia social, pero la discriminación sigue existiendo".

El sitio Web Cubanet informó además que dos agentes de seguridad cubanos detuvieron a Imbert Acosta el 11 de septiembre cuando salía de su casa, en La Habana, para entregar materiales de denuncia a Mariela Castro, directora del oficialista Centro Nacional para la Educación Sexual (CENESEX).

Los documentos que llevaba exponían la represión a que fueron sometidos los homosexuales cubanos, confinados en el pasado en campos de trabajos forzados a los que el gobierno comunista envió a más de 25.000 hombres gays y otros que no se consideraban aptos para la sociedad socialista, durante la década de 1960.

Castro, hija del general Raúl Castro, ha dicho que CENESEX llevaría a cabo una investigación sobre estos campos, conocidos como Unidades Militares de Ayuda a la Producción, o por sus siglas UMAP, pero Imbert y otros activistas sostienen que Castro se ha negado a trabajar con ellos en esta cuestión.

María Werlau, directora de Archivo Cuba, y quien participó también en el evento, dijo al programa Cuba al día, de Radio Martí, que la actividad llevada a cabo fue muy positiva pues se pudo demostrar ante representantes de la comunidad negra y gay estadounidense, muy sometida a la propaganda castrista, la naturaleza represiva y excluyente del régimen comunista de la isla.