El sobrecargo es parte de las medidas del gobierno para eliminar la circulación de la moneda estadounidense en la isla comunista.
Desde la semana pasada, los dólares ya no son aceptados en las tiendas, restaurantes, hoteles u otros comercios.
Pedro Michelena, de 82 años, dijo que un grupo de extranjeros le habían dado un dólar por haber cuidado su automóvil y entonces tuvo que hacer la cola para el cambio, porque a partir de este lunes su dólar valdría sólo 90 centavos.
En una casa de cambios de La Habana, el jubilado cubano explicó que la semana pasada canjeó los otros 26 dólares que tenía por pesos convertibles, es decir, pesos cubanos que pueden cambiarse en dólares y que ahora son la moneda legal dominante en la isla.
El gravamen del 10 por ciento no regirá para otras monedas extranjeras como el Euro o el dólar canadiense y no se cobrará una comisión para comprar dólares estadounidenses.