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EL CASO DE CUBA EN LA COMISION DE DERECHOS HUMANOS


Christine Chanet, la Representante Especial para el caso de Cuba, dijo el miércoles que las personas arrestadas durante la ola de opresión fueron juzgadas precipitadamente, sin la presencia de sus abogados, y que un Grupo de Trabajo de Naciones Unidas considera que fueron arrestadas arbitrariamente.

Chanet añadió que preocupa mucho las condiciones del encarcelamiento de esas personas y que en vista de la situación, en su informe a la Comisión ha hecho una serie de recomendaciones. Manifestó que por otra parte Cuba ha logrado algún progreso en los campos económico, social y cultural, así como en el de la libertad de religión.

La Representante Especial hizo esos comentarios al inaugurarse el tratamiento del asunto de la violación de derechos humanos y libertades fundamentales en muchas partes del mundo, Cuba incluida. Se trata de un tema que anualmente causa encendido debate en la Comisión.

Un representante del gobierno comunista de Cuba, Jorge Iván Mora Godoy, refutó la presentación de Chanet diciendo, entre otra cosas, que su informe forma parte de prácticas politizadas e injustas que la Comisión ha entronizado en su tratamiento parcial, selectivo y discriminatorio de los países del Sur. Según Mora Godoy, esa práctica ha sido determinada por la política de dominio que el gobierno de Estados Unidos trata de imponer en Cuba con varias agresiones, entre as cuales se incluye "el bloqueo genocida" de cuatro décadas.

Por su parte Chanet explicó a la Comisión que había tratado de obtener la cooperación del gobierno de Cuba para rendir el informe y que no la consiguió. Dijo que en vista de esto había obtenido la ayuda de otras fuentes y mecanismos de Naciones Unidas para escribir el documento. Aseguró que la información que contiene corresponde a la que hay disponible en otros organismos de Naciones Unidas y que por este motivo el documento es imparcial y objetivo.

Mora Godoy insistió en que Chanet había aceptado un mandato que inexorablemente la llevaría a convertirse en un instrumento de la política de Estados Unidos de constante agresión contra Cuba. Aseguró que el informe de Chanet es consistente con el raciocinio político e ideológico que determina el comportamiento de Estados Unidos y sus aliados en la Comisión de Derechos Humanos.

"El informe", dijo Mora Godoy, "repite y amplía los embustes y las mentiras de Estados Unidos y sus compinches de la pandilla anticubana radicada en Miami. Es una farsa de principio a fin. La Representante Especial hizo una referencia del bloqueo, como si no le quedara otro remedio que mencionarlo para quedar con la conciencia tranquila y no perder su alegada objetividad ante el aplastante repudio mundial. Sin embargo, insultó y ofendió a Cuba llegando a la conclusión de que el bloqueo sirve de excusa al gobierno cubano para imponer lo que ella califica de leyes represivas . . ."

Chanet replicó diciendo que su informe es imparcial aunque esto es una cuestión relativa porque las autoridades cubanas no se interesaron en proporcionar su punto de vista cuando se les pidió. Subrayó que , no obstante, ella incluyó en el informe aspectos positivos en el comportamiento de Cuba, aunque no pudo dejar de inquietarse al descubrir aspectos negativos, sobre todo cuando tenían que ver con violaciones de los derechos humanos. Insistió en que basó sus conclusiones exclusivamente en el criterio que los estándares internacionales han establecido.

Mora Godoy dijo entonces que no deseaba adentrarse en la sustancia de una anterior declaración del Embajador de Cuba, pero que "infortunadamente a alguna gente no le agradó oir la verdad. Cuba fue muy cuidadosa en no ofender la dignidad de la Representante Especial. Deseaba subrayar que la libertad de opinión y expresión incluye la libertad para hablar y oir. Nadie tenía el derecho de socavar el legítimo derecho de Cuba para defenderse… Cuba deseaba expresar su objeción a la interrupción de la Presidencia durante la declaración primera del embajador cubano. La declaración de la Representante Especial del Alto Comisionado era altamente innecesaria, así como irrelevante en el contexto presente. Cuba sólo había deseado venir a este foro para decir la verdad y buscar justicia. Nadie podía despojar a Cuba de su arma principal, que es la verdad", manifestó Mora Godoy.

Bertrand Ramcharan, Alto Comisionado Interino para Derechos Humanos, declaró que deseaba agradecer a la Representante Especial la tarea que había llevado a cabo. Agregó que ella "es una persona de impecable integridad y su trabajo siempre lo ha reflejado".

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