Trobo, representante por el Partido Nacional, dijo a ese servicio noticioso que el Parlamento uruguayo ha puesto en conocimiento de la Comisión, reunida en Ginebra, la violación de los fueros parlamentarios que determinó una protesta por el espionaje al que fue sometido.
El diputado señaló que la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Latinoamericano, Parlatino, decidió la semana pasada transferir a Santiago de Chile su próxima reunión, ante la negativa del gobierno cubano a permitir que el encuentro se realice en La Habana entre el primero y el 2 de abril.
Para la cita en la capital cubana estaba previsto un análisis de la situación en la Isla. Además, los participantes tenían planeadas reuniones con una treintena de representantes de organizaciones no gubernamentales.
El incidente por el espionaje telefónico y de los correos electrónicos del legislador uruguayo estalló cuando el miembro de la Asamblea Nacional cubana Lázaro Barredo acusó a Trobo, durante una visita a Montevideo, de utilizar el Parlatino para conspirar contra Cuba.
Barredo admitió posteriormente, en una carta publicada por el diario uruguayo La República, que el gobierno cubano conocía todas las llamadas telefónicas que Trobo realizó a Miami, Madrid, La Habana y Puerto Rico.