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Críticas a Cuba en la jornada de lucha contra el SIDA


La independiente Liga Cubana contra el SIDA emitió una declaración en la que denuncia la política que ha adoptado el régimen comunista contra las personas portadoras del VIH que permanecen en las cárceles.

La comunicadora Yoani Sánchez, autora del blog Generación Y, deploró la decisión tomada por Cuba recientemente en la ONU, sobre el homosexualismo como delito, y pide aclaraciones a Mariela Castro.

En su declaración, la Liga Cubana contra el SIDA desmiente a los organismos de Salud Pública y al Consejo de Estado y de Ministros de la República de Cuba por asegurar haber cubierto todas las necesidades y garantizar las libertades y derechos humanos de los pacientes de SIDA en la isla.

Según el grupo civilista, el régimen debe responder ante los organismos de Naciones Unidas en la lucha contra el SIDA y no ocultar más la información de que en estos momentos el número de infectados con la enfermedad es más alto que nunca y que, por otro lado, la cifra que ofrecen las entidades castristas es la correspondiente al año 2009 y no al 2010.

Cuba, que según informes locales figura entre los 22 países del mundo menos afectados por el virus, afirma haber contenido la propagación del VIH/SIDA al mantener la prevalencia nacional en 0,1%.

Yoani, en un artículo intitulado "Mercado del silencio", manifiesta que aún no puedo creer que la delegación cubana en la ONU se sumó con su voto a un grupo de "países que contemplan la homosexualidad como un delito dentro de sus legislaciones, incluyendo la pena capital por ese motivo, en cinco de ellos".

Yoani explica que "la frase entrecomillada no la he inventado yo, sino que proviene de una declaración por el CENESEX para intentar explicar ese absurdo, justificar lo abominable".

Agrega que "en una peculiar lista, en la que aparecen algunos grandes avasalladores de las libertades individuales, está también esta Isla, donde el discurso oficial asegura -de un tiempo a esta parte- que el capítulo del atropello a homosexuales es cosa del pasado".

La bloguera, de lo más popular en el mundo pero censurada en Cuba, destaca que nadie consultó a los cubanos para ratificar "una resolución que da carta blanca a la pena de muerte motivada por la orientación sexual de las víctimas".

"Ni una palabra se dijo en la prensa oficial, ni un solo travesti ha podido salir a protestar en la Plaza de la Revolución o frente al Ministerio de Relaciones Exteriores como muestra de su desagrado con este gesto de conveniencia política", subrayó Yoani.

Ella explica que Benin fue el país que impulsó un cambio en la resolución sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias en el mundo, con lo cual "la ONU ya no observará si el acusado llegó a esa situación por amar a otro de su propio género".

En ese sentido comentó que "estamos asistiendo espantados a la rueda que lanzan los intolerantes, a la complicidad que se establece entre sectarios, que enmudecen ante las violaciones cometidas por otros, comprando así su silencio para cuando ellos mismos lo necesiten".

Es triste que el CENESEX haga maromas verbales para no llamar las cosas por su nombre, puntualizó la joven escritora radicada en La Habana, tras opinar que "Mariela Castro no puede permanecer parapetada de las escuetas palabras de un comunicado donde no se lee una condena proporcional al error que ha cometido nuestra delegación en la ONU".

Yoani cree que el próximo domingo, en el programa Pasaje a lo desconocido de la televisión nacional, Mariela debería explicar "por qué su respuesta no ha sido más enérgica, por qué su silencio nos ha sonado tan encubridor".

Entretanto, la Organización Panamericana de la Salud informó que las infecciones de VIH en Latinoamérica han descendido y la coordinación de los países en la lucha contra el sida ha mejorado, aunque persisten muchas "oportunidades perdidas".

De acuerdo al informe 2010 de ONUSIDA -la agencia de la ONU contra esa enfermedad-, la propagación de VIH en Latinoamérica se mantuvo estable, aunque ha marcado un descenso en 2009: 92.000 personas contrajeron el virus, contra 170.000 el año anterior.

El miércoles, ONUSIDA premió al presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva por el trabajo de su gobierno en el diseño de políticas de atención universal, en el país con más afectados por la epidemia en el continente: unas 630.000 personas viven con VIH/SIDA.

El premio ONUSIDA al Liderazgo fue atribuido a Lula da Silva por el desarrollo de un plan universal de atención médica gratuita a personas con SIDA en la red de salud pública, que atiende en la actualidad a más de 200.000 personas en todo el país.

Pulse en el audio si desea escuchar desde Quemado de Guines, Villa Clara, a Ignacio Estrada Cepero, quien da lectura a la declaración de la Liga Cubana contra el SIDA.

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