Siria concluyó el mes pasado casi 30 años de presencia militar en Líbano, respondiendo a fuertes presiones internacionales.
La retirada ocurrió después del asesinato en febrero del ex primer ministro libanés Rafik Hariri, un destacado opositor a la intervención siria en Líbano.
Por otra parte, militares libaneses dijeron que sus soldados mataron inadvertidamente a un civil, cuando intentaban impedir enfrentamientos entre facciones políticas rivales al noroeste de Beirut.
Los soldados hicieron disparos de advertencia a manifestantes, unos a favor y otros en contra de Siria, que peleaban en una aldea de mayoría cristiana, y los disparos hirieron mortalmente a un miembro de la facción pro Siria.