En una carta dirigida a Castro, Buzek señaló que la concesión de los permisos necesarios sería apreciada por la Eurocámara y tendría un impacto positivo en las relaciones de Cuba con la Unión Europea.
Fariñas protagonizó una huelga de hambre de 135 días para demandar la excarcelación de los presos políticos enfermos. El Parlamento Europeo otorgó el mes pasado su distinción al sicólogo y periodista villaclareño.
Horas antes del Día Internacional de los Derechos Humanos, el opositor declaró que los cubanos de a pie son como los esclavos de la plantación, porque tienen que pedir permiso al gobierno para viajar.
El psicólogo de la raza negra, desde su casa en Santa Clara, tiene un anhelo de lo más simple. Desea visitar la ciudad francesa de Estrasburgo para recoger el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia que le otorgó el Parlamento Europeo.
Es un honor ese premio, dijo Fariñas, a quien le encantaría poder viajar a Europa con su madre. Ha llenado los papeles y ha hecho los trámites, pero aún no tiene el permiso, o la tarjeta blanca. El disidente lamentó que necesita un papel con permiso.
Volviendo al tema de la esclavitud, explicó su punto. "Nosotros tenemos que pedir una carta blanca para viajar. Los esclavos de plantación del siglo pasado tenían que pedir una carta de libertad para salir de la plantación".
La ceremonia en Estrasburgo es el 15 de diciembre. Fariñas piensa que no podrá salir, porque el gobierno comunista no quiere que salga y no quiere que se pronuncie a favor de la Posición Común de la Unión Europea, "que se atreve a pedir el respeto a los derechos humanos en Cuba".