La oferta permite que Naciones Unidas utilice la infraestructura aérea y naval de Singapur, así como las oficinas gubernamentales para gestionar y distribuir la asistencia en las zonas afectadas.
El centro de coordinación, que se establecerá en los próximos días, permanecerá en funcionamiento hasta que sea necesario.
Mientras tanto, la Autoridad Portuaria de Singapur anunció que todas las mercancías que salgan de sus instalaciones con destino a los países devastados estarán exentas de impuestos.